Artesanos reclaman a la Municipalidad de Merlo por un espacio donde poder trabajar
Presentaron una medida cautelar con el objetivo de que se les autorice a tener sus puestos en la Plaza Sobremonte. Sostienen que desde el inicio de la gestión de Álvarez Pinto “hay problemas”.
La presidenta de la Asociación de Artesanos de Merlo y Comechingones, Alejandra Sosa, explicó en declaraciones a El Chorrillero que desde que asumió el intendente Juan Álvarez Pinto frente al Gobierno de la Villa hay “inconvenientes para ejercer la actividad, más allá de la pandemia”.
El problema surge porque no tienen un espacio donde trabajar y a pesar de que han hecho presentaciones para trabajar en la Plaza Sobremonte, siempre fueron rechazadas. La Municipalidad se ampara en una ordenanza.
Por este motivo, en diciembre del año pasado los artesanos presentaron una medida cautelar en el Juzgado Multifuero de Santa Rosa. El juez de Primera Instancia en lo Civil, Comercial, Minas, Laboral, Familia, José Ramiro Bustos determinó un proceso de mediación que tendrá audiencia el próximo miércoles 8, para llegar a un acuerdo.
Esta situación los ha llevado a realizar todos los sábados concentraciones en la plaza principal del pueblo, sobre calle Becerra. Como método de protesta, colocan carteles, recolectan firmas de personas que apoyan su trabajo y también venden sus productos.
La propuesta que elevaron al Municipio era trabajar en temporada alta de jueves a domingos, en época de turismo bajo sólo los viernes y sábados, y todos los feriados largos del año.
Sosa, indicó que mantuvieron con la gestión municipal “muchas reuniones pero todas infructuosas”.
“Se nos planteaba que no podíamos estar porque no teníamos un seguro, luego que no había baños. Siempre faltaba algo”, añadió.
“Antes trabajamos en la Plaza Sobremonte y abonábamos un canon. Sin embargo, en enero y febrero del 2020 no se pudo hacer nada porque desde la Municipalidad nos decían que teníamos que ir a otro espacio, lugares donde no había circulación de gente. Eso agravó nuestra situación económica, porque pasamos un verano sin actividad. Tuvimos que invertir para trasladarnos a otras localidades o pagar ferias privadas”, cuestionó.
Expuso además que todo empeoró con la pandemia.
“Estábamos llenos de deudas y en nuestro caso se notó más porque por lo general vivimos el día a día. Todos los pedidos de bolsones de alimentos que hicimos no se respondieron, hubo una indiferencia muy grande por parte del Ejecutivo”, manifestó.
“Al no tener un lugar fijo, debemos asistir a ferias privadas, autogestivas o emplazarnos en otros sectores de la ciudad, aunque la mayoría se dedica a otra cosa para poder vivir, es desesperante la situación”, dijo.
Asimismo, desde la asociación plantearon la posibilidad de pagar el permiso por estar en la plaza pero no han sido autorizados.
“Hasta no tener respuestas concretas, vamos a seguir con los reclamos los sábados y ojalá en la mediación, los funcionarios municipales acerquen una propuesta que tenga empatía con la necesidad de trabajo que tenemos", cerró.