ELECCIONES DEL 14 DE NOVIEMBRE
Patricia Bullrich advirtió que no van a permitir que el kirchnerismo haga trampa
La titular del PRO envió un fuerte mensaje el día después del triunfo nacional de la oposición sobre el Frente de Todos. Rescató el resultado de Claudio Poggi que “arrasó” con el Frente Unidos por San Luis y aseguró que van “estar presentes en cada provincia” para impedir el uso del aparato del Estado para dar vuelta una elección.
Patricia Bullrich avisó que Juntos por el Cambio no permitirá que el kirchnerismo haga trampa como ocurrió por ejemplo hace cuatro años en San Luis, cuando los hermanos Rodríguez Saá se recuperaron de una paliza electoral en las PASO a partir del clientelismo. Echaron manos a los recursos del Estado que fueron puestos al servicio de la campaña del partido oficial.
“Nosotros vamos a trabajar con mucha fuerza porque tuvimos la experiencia de 2017 que ellos ganaron provincias como San Luis, luego de bajar un aparato brutal que dio vuelta la elección”, tuvo en cuenta la dirigente este lunes durante una entrevista con Jonatan Viale en el programa +Realidad del canal La Nación+.
“Arrasamos con Claudio Poggi”, dijo en referencia a la victoria del domingo del Frente Unidos por San Luis.
Bullrich anticipó que en “esta oportunidad la decisión es ir a acompañar, a denunciar y estar presentes en cada una de las provincias donde utilicen el aparato del Estado para intentar por medios no legales y corruptos dar vuelta una elección”, y dejó en claro que “estarán todo el tiempo necesario para que sea por los votos y no otro instrumento” la forma de ganar.
En 2017 el Frente Avanzar y Cambiemos que también lideró Claudio Poggi se impuso en las PASO sobre los Rodríguez Saá, que integraron la fórmula de candidatos a senadores nacionales.
En aquel año de arranque nomás los hermanos se aprovecharon de la caja del Estado para financiar en la campaña electoral de las primarias un plan de becas para jóvenes y multiplicar la asistencia social.
Tras la derrota exhibieron el peor rostro de la política con la utilización clientelista de los fondos públicos. Desde el reparto de cheques oficiales para la compra de materiales hasta el subsidio exprés de $80 millones del gobernador Alberto Rodríguez Saá a la Fundación de la esposa de su hermano para que regalara electrodomésticos, que desembocó en una causa en la Justicia Federal. Los manotazos del kirchnerismo puntano incluyeron la creación de 80 mil planes sociales que fueron moneda de cambio de un chantaje. En Nogolí, por ejemplo, se comprobó y denunció la entrega de votos marcados. Se prometía que el beneficio iba a llegar a manos del ciudadano una vez que el rodriguezaísmo acreditaba que efectivamente el sufragio había sido depositado en la urna.