SUR DE LA CIUDAD
Preocupa la inseguridad en el Barrio El Lince; crece el robo en vehículos estacionados
Desde hace un tiempo los vecinos vienen sufriendo esta modalidad. Los rodados son atacados en la puerta de los domicilios.
En esa zona, el mal funcionamiento de las luminarias ha sido siempre un problema y reclamo constante. Ahora la inseguridad comenzó a preocupar a los habitantes del Barrio El Lince, como nunca antes.
Marcos Ochoa dio a conocer por las redes sociales, que en la madrugada del domingo fue víctima de los malvivientes. “Me forzaron la puerta trasera de la camioneta, y me robaron una mochila, ropa, documentación y el estéreo”, contó el damnificado en diálogo con El Chorrillero. Su Fiat Fiorino había quedado estacionada en la puerta de su casa.
En el último tiempo, este tipo de robos se volvió frecuente: abren los rodados y se llevan todo lo que pueden, en las narices de los dueños. “Lo que uno lamenta es la pérdida de las cosas materiales que a uno le cuesta. Cuando hacés la suma del valor total, te duele. Te queda mucha bronca”, expresó Ochoa.
Mientras cometía el delito, el ladrón se lastimó y dejó las manchas de su sangre por todos lados; en el la puerta, en el tablero y el asiento. Un cuchillo quedó clavado en la puerta que no pudieron abrir.
“No veo que valga la pena ir a hacer la denuncia, por el tiempo administrativo que se pierde. Ese tiempo lo necesito para trabajar, porque de lo contrario pierdo plata”, contó el damnificado.
En Facebook publicó el robo con la ilusión de recuperar algo: “Son elementos que no están en todos lados, no son comunes, como el estéreo y la mochila que tienen marcas específicas”.