Tamayo quiere superpoderes para reasignar partidas del presupuesto
En anteriores proyectos se fijó un porcentaje para la transferencias, pero ahora el intendente trata de, a través de sus concejales y aliados, disponer de fondos a discreción.
El intendente capitalino, Sergio Tamayo, continúa los pasos de su jefe político, el gobernador Alberto Rodríguez Saá al pie de la letra. Ahora, busca administrar y reasignar recursos sin ningún tipo de control o límite.
Esto fue plasmado en el proyecto de Presupuesto General Municipal 2022 que por estos días es abordado en la Comisión de Hacienda. En tres artículos esboza sus intenciones.
El Nº 9 es claro: “El Poder Ejecutivo Municipal podrá disponer las reestructuraciones y/o modificaciones que considere necesarias, incluyendo cambio de jurisdicción, finalidad, como así también los planes analíticos de Obras y Servicios Públicos”.
Este punto es fuertemente criticado por parte de la opción. El concejal de San Luis Unido (Avanzar), Guillermo Araujo calificó a la maniobra como “una burla”.
“Hace que el resto del Presupuesto no tenga sentido, puede cambiar lo que quiera. Es un cheque en blanco. A atropellos como éstos hay que ponerle un freno”, sostuvo en una publicación de Twitter.
En otro de los tramos del proyecto, Tamayo marca el uso de “transferencias presupuestarias que fueren necesarias como consecuencia de cambios en la estructura orgánico funcional que se encuentre vigente, respetando la clasificación económica del gasto”.
El Presupuesto enviado por el municipio es de $4.998.688.984,29. De ese monto se planea que el 16,89% sea para gastos de capital (entre otras cosas obras) y 82,83% de corrientes, es decir, sueldos e insumos.
En relación al de 2021, se consideran 26 personas más para cumplir funciones en el Gabinete municipal y 56 menos en la planta temporaria. Además, la planta de intendencia pasa de ser 11 a 42.