Vecinos de barrios del oeste reclamaron que 6 mil personas no tienen acceso al agua potable
A través de una carta abierta y reclamos simbólicos en la Plaza Pringles, un grupo de vecinos dieron cuenta del difícil escenario que viven cientos de familias. Piden obras urgentes.
Las solicitudes son numerosas y para nada nuevas. Pero pese a los múltiples reclamos, vecinos de la zona oeste de la ciudad de San Luis todavía no son escuchados ¿Qué piden? Tener los servicios básicos para vivir un poco mejor.
Ya a comienzos de semana habitantes del sector oeste de la ciudad habían advertido de la delicada situación que los envuelve y que se tornó más preocupante con la llegada del calor. Recientemente se concentraron en la Plaza Pringles para visibilizar la situación.
Elaboraron una carta abierta dirigida al Gobierno provincial, a la Municipalidad y a los “candidatos que en las elecciones ganaron y perdieron”. La asamblea barrial La Poderosa, que encabezó la manifestación este viernes, explicó que hay cerca de 6 mil personas que no tienen agua potable.
“Somos iguales a ustedes pero nos falta el agua. No podemos esperar mucho, nuestras hijas e hijos tienen sed y no podemos vivir sin agua. Nuestras familias, como las suyas, necesitan agua para vivir”, reza el escrito que leyeron a la comunidad.
El reclamo de los vecinos el viernes. (Foto: Radio La Bulla).
Los vecindarios más afectados son el 1º de Mayo y el República, barrios históricamente postergados, sobre todo el segundo. La falta de agua no es el único inconveniente que mantienen por estos días, sino que se le suman la electricidad (a la que acceden con conexiones clandestinas), cloacas y hasta gas natural.
En la misma exposición, los integrantes de la asamblea hicieron unos cálculos para poder satisfacer la necesidad de esta cantidad de vecinos, sin una obra mediante.
“No somos números de Excel, somos personas. La Organización Mundial de la Salud indicó que una persona consume 50 litros de agua para beber, comer, higienizarse, etc. Necesitamos 27 millones de litros para estos tres meses. Son 3.375 camiones cisternas que costaría $13 millones”, resaltaron.
Y en este sentido dijeron que con el 0,13% de lo presupuestado para Seguridad para el 2022 “podría cubrirse la demanda del verano”.
“No tenemos un título universitario como ustedes, sabemos de las obras que se necesita para llegar a los barrios y su complejidad pero esto es urgente”, reiteraron.
La protesta contó con murgas, improvisaciones de bandas y con carteles con la consigna “agua para vivir”. Desde el más grande hasta el más chico dieron cuenta de la necesidad.
“Creemos que después de casi 30 años de gobierno ininterrumpidos, aunque no hayan construido obras para la distribución de agua, sería bueno creer que construyeron criterios”, culminaron.