El drama de los vecinos del barrio Juan Manuel de Rosas cada vez que llueve: “Se nos inundan nuestras casas”
Llevan varios años pidiendo que limpien un canal de Martín de Loyola, pero la Municipalidad de San Luis no asiste el problema.
Los vecinos del barrio Juan Manuel de Rosas de la capital puntana conviven con el mismo problema desde hace muchos años, sobre todo en el verano, porque cuando llueve se les inundan sus casas.
El canal que viene por Martín de Loyola es el punto del cuestionamiento. El tramo que empieza en Justo Daract y que choca con la avenida Eva Perón, está tapado. Tiene por al menos un metro y medio de barro, residuos y hasta escombros: por eso cuando llueve el cauce se dirige hacia los domicilios que están ubicados sobre el pasaje Buena Esperanza.
Lo único que tiene que hacer la administración de Sergio Tamayo son tareas de limpieza para que el agua se conduzca por el canal sin obstáculos; pero no lo hace y los vecinos se inundan con cada tormenta. Todo esto sucede a pocas cuadras del centro de atención al vecino “Los tres barrios” que administra la Municipalidad. Este es uno de los 11 que funcionan en toda la ciudad con el objetivo de estar “más cerca” de los vecinos “escuchando sus necesidades y buscando las alternativas de solución”.
“Cuando llueve, el agua putrefacta que queda muchas veces se mete dentro de las casas. Esto viene de años y no tenemos respuestas concretas por parte de las autoridades”, explicó Alberto Beato, un vecino de la zona, en declaraciones a El Chorrillero.
Quienes habitan sobre Justo Daract, entre Martín de Loyola y Abelardo Figueroa, también se ven afectados, ya que reciben de lleno el agua que desborda del canal. Por eso algunos realizaron medianeras o construyeron “desniveles” en las veredas para contener el líquido, pero a veces no funciona.
Beato indicó que en noviembre se realizaron reclamos a la Municipalidad, pero las respuestas nunca llegaron, y por eso buscaron hacer pública la situación.
“El director de Serba me dijo que no tienen (recursos) para destapar una cloaca domiciliaria, menos podrán hacerlo con un canal. El requerimiento fue elevado a Vialidad Municipal pero nunca se contactaron”, expuso.
También dijo que el agua que baja por calle Abelardo Figueroa viene con tanta fuerza que “ha llegado a encimar autos”. Esto desemboca en la avenida Fuerza Aérea afectando otras viviendas y negocios.
Por su parte, Franco Andrada recordó que la última limpieza fue en 2017: “El problema es que nadie viene a sacar todo esto. Hace años que está así e inunda todo el barrio. Hay vecinos que pierden todo cuando llueve”.