Así fue el homenaje a Juan Gilberto Funes en el cementerio donde descansan sus restos
La ceremonia reunió a sus familiares más íntimos. Dejaron una ofrenda floral en el mausoleo donde descansa junto a su padre y los recuerdos de sus logros deportivos. Se cumplieron 30 años de su fallecimiento.
Pasadas las 11 de este martes, Agustina Rosalez, sobrina de El Búfalo y miembro de la Fundación Juan Gilberto Funes in Memoriam dio inicio a la conmemoración que fue íntima y reducida debido a la pandemia.
Primero hubo un minuto de silencio acompañado por el sonido de un clarinete y luego, con la presencia de un sacerdote rezaron por el eterno descanso del futbolista puntano. Además dejaron en el mausoleo, donde Juan está junto a su papá Pedro Funes, una ofrenda floral como todos los años.
María Funes es hija de Juan, y se mostró muy conmovida por estar ahí. En pocas palabras resaltó a su padre como una persona de “corazón grande” que dejó huellas en lo futbolístico, pero mucho más en la vida, donde siempre se lo reconoció por su simpleza y humildad.
“Es una fecha muy importante y estamos todos”, remarcó. Acompañó también Juan Pablo Funes Bianchi, también hijo del ídolo.
En Millonarios de Colombia, Juan Gilberto Funes marcó 55 goles en un año y medio y dejó un legado eterno. Muestra de ello fue la presencia de Hollman Vargas, un colombiano fanático del elenco de Bogotá que lleva al jugador tatuado en su pierna. Hoy vive en Merlo, y no quiso perderse el homenaje.
“Para mí y todos los colombianos fue uno de los mejores delanteros que hemos tenido. Representa mucha historia porque hasta mi abuelo me habla de él”, contó en declaraciones a El Chorrillero.
En su visita, el fanático le obsequió una camiseta de Millonarios a la familia Funes y mostró un tatuaje que tiene con el rostro del puntano.
Además, contó: “Una de las primeras barras sanas que hay en Bogotá recibe el nombre de ‘La Barra del Búfalo’ en su honor y es una de las pioneras”.
A la conmemoración no pudo asistir Gladys Funes, hermana del Búfalo, por encontrarse aislada por contacto estrecho de un caso de covid. Por prevención y para cuidar su salud, atentos a la ola de contagios que hay en la ciudad, tampoco concurrió Martha Baldovino, mamá del futbolista.
“Quisimos hacer algo conmemorativo porque eran 30 años, pero por la pandemia se complicó. De todas formas, tratamos de que el recuerdo de mi tío viva para siempre, y lo mantenemos presente”, dijo Agustina.
Juan falleció a los 28 años, el 11 de enero de 1992 luego de una operación al corazón en el Sanatorio Güemes de la ciudad de Buenos Aires.