Denunció que a su madre le diagnosticaron hemorroides, pero tenía una hemorragia; ahora está en coma
El 28 de diciembre Nora Stabile acudió a la guardia del Policlínico Regional por una hemorragia, quedó internada y ahora su familia está desesperada. La hija aseguró que “hubo mala praxis y negligencia médica”.
Camila Palma es una estudiante de enfermería que decidió después de casi un mes de lucha hacer público el calvario que vive junto a su madre Nora Stabile. La mujer está internada desde el 28 de diciembre en el Hospital de San Luis.
Ese día cerca de las 7 de la mañana Nora llamó a Camila porque necesitaba ir al baño, porque estaba descompuesta y no tenía fuerzas para hacerlo por sus propios medios. Fue en ese momento, que se percataron que tenía una hemorragia por lo que se dirigieron a la guardia del Policlínico.
“Llegamos cerca de las 9, le dieron una habitación y le hicieron unos análisis de sangre, de los cuales nunca me dieron los resultados, solo me enteré después que tenía la hemoglobina baja”, explicó Camila en comunicación con El Chorrillero.
La joven expresó que su mamá tiene una cardiopatía de base: “Es una paciente que está anticoagulada lo que significa que la sangre no coagula con facilidad”, y aseguró que nunca le consultaron si tenía algún tipo de enfermedad.
Al pasar las horas, cuando la atendieron le dijo que le iban a tener que realizar una transfusión de sangre porque se encontraba anémica y que lo que tenía era “solo una hemorroide”.
“Obviamente que iba a estar anémica con tanta sangre que perdió, perdió la totalidad de su sangre”, relató.
“Desde la 10 en adelante nunca le hicieron la transfusión, recién a las 16:30 vinieron los ayudantes de la cirujana para realizarle una apartación anal y me informaron que no era hemorroide”, continuó.
En ese instante le comunicaron que su madre tenía que ser intervenida quirúrgicamente, pero necesitaba de inmediato la transfusión de sangre.
“La médica nunca pidió la sangre, me cansé de pedírsela y encima me contestó de muy mala manera que ella también estaba esperando pero que los del banco no se la traían. El banco queda a la vuelta del Hospital y si ves a una persona desgarrándose, tenés que estabilizarla”, apuntó Camila que acusó con nombre y apellido a los profesionales, en un posteo que hizo en Facebook.
Recién a las 18 la mujer comenzó a recibir la transfusión, pero lo llamativo es que “le colocaron un catéter de niño” y toda la sangre que le ingresaba, la expulsaba: “Iba a ser imposible que tuviera éxito ya que la sangre es espesa, el calibre no era el adecuado y menos dónde se colocó”.
Aproximadamente a las 19:30, Nora se sentía muy mal y pidieron que la asistieran de inmediato. Entonces la llevaron a terapia intensiva porque “estaba pasado por un shock hipovolémico”.
A las 20:30 ingresó al quirófano en donde le realizaron una colostomía total y desde ese momento pasó 18 días en coma farmacológico.
“El viernes 18 la sacan del coma ya que habían logrado controlar la presión y la arritmia cardiovascular y el 19 cumplió 60 años. Las enfermeras le festejaron el cumpleaños, unas genias”, contó Camila.
Ese fue el último día que su madre abrió los ojos porque su sistema inmunológico “ya no responde” y tiene un daño en el cerebro que hasta el momento no han podido diagnosticar
“Ahora tiene una infección en la sangre, tiene una infección en el corazón, tiene problemas en la piel. Casi se muere desangrada en la guardia por la inoperancia de la médica”, enfatizó.
Afirmó que "infinitas veces" intentó hablar con el director, José Núñez pero nunca logró que la atendieran.
“No sé si me evita o qué, pero supuestamente nunca está, y he pasado horas esperándolo. Yo quiero que me atienda porque quiero que sepa lo que pasa en su Hospital”, expresó la joven.
“Una mala praxis y una negligencia médica importante. Hoy mi mamá no abre sus ojos, no habla, de mi mamá se olvidaron, se olvidaron de atenderla, de ayudarla, nadie nos escuchó, nadie la escuchó. Nadie merece lo que le hicieron a mi mamá, ni usted, ni yo, ni nadie”, insistió.