Quejas en el "Ramón Carrillo": el mismo personal atiende dos hospitales de San Luis
Desde que la guardia comenzó a funcionar en la flamante estructura hace una semana que las quejas alrededor del funcionamiento son noticia.
“Ojalá pudieras entrar y ver el desastre que es acá, un montón de gente, no soy el único”, dijo en la tarde de este jueves Javier Díaz, cuando se enteró que desde el Hospital Ramón Carrillo donde se encuentra internado del lunes, salió la información de que estaba “bien atendido” y que recibía “la medicación y la dieta correspondiente” para su cuadro de salud.
Díaz era brigadista de San Luis Solidario. Hace 12 años su cuerpo se quemó en el 80% y le quedaron graves secuelas con las padece día a día. Este miércoles grabó un video para contar la mala atención y cómo tenían que esperar los pacientes para que les administraran la medicación.
“No es mentira, no soy el único; hay un montón de personas como yo en este momento”, aseguró en horas de la siesta.
Detrás de todos los reclamos hay un problema que el Gobierno no dice y tampoco quiere solucionar. No existe en este momento la cantidad de profesionales para atender la demanda de la atención en la guardia del Hospital Central.
“Las camas son muy bonitas, todo el edificio, pero no hay médicos”, se quejó un pariente de Díaz. Y ese parecer es el mismo de todos los que en la última semana fueron a la guardia y tuvieron que esperar hasta 6 horas para ser atendidos.
El 19 de enero fue el día del “pleno funcionamiento” y del caos. Alfredo Valenzuela contó todos los detalles y su enojo a través de las redes sociales. Su hijo, recién operado levantó temperatura y lo llevó a la guardia las 16:20. Recién lo atendieron cera de las 23.
La gente cada día deja en claro que no va en busca de “lujos”, sino con la ilusión de encontrar una buena salud pública. Ese día el hombre advirtió: “Están bastante desorientados de cómo atender”.
De ahí para adelante el panorama no cambió, y puso a los profesionales de la salud en la primera línea de los cuestionamientos y responsabilidades que les sobrepasan. Son los que tienen que dar la cara y no tienen respuestas, porque no les alcanzan las manos, ni los pies, ni las horas para brindar una mejor atención.
Las guardias tienen tres enfermeras para atender un mínimo de 100 pacientes: están desbordadas. También hay dos médicos, según confirmó hoy la Asociación de Profesionales y Técnicos de la Salud (APTS). Por otra fuente consultada por El Chorrillero se supo que el personal está trabajado 12 horas y les pagan un sueldo como si hicieran 8.
El imponente edificio se habilitó pero el Gobierno usó los mismos profesionales del Policlínico Regional: traducido, están sosteniendo dos hospitales con el mismo personal.
“Es un asco en todo los aspectos. Mi mamá fue por una urgencia, 3 horas, nunca nos atendieron y nos vinimos sin atención”, contó a través de Facebook Pame Alcaraz.
Por su parte, Juanjo Agüero sostuvo: “A una tía la tuvieron hasta las 12 de la noche, todo el día. Ella asmática y NO la atendieron! Un desastre lamentablemente”.
“Es verdad, no hay enfermeras, no hay plata para tomar profesionales de la salud, pero sí hay plata para gastar en mansiones”, opinó otra paciente.