Expectativa en las inmobiliarias de San Luis por los cambios en la Ley de Alquileres: este mes el aumento fue del 55%
En el ámbito local coinciden en que los principales cuestionamientos son el plazo de los contratos y las actualizaciones sobre el IPC y el Ripte. Consideran además que la implementación de un impuesto a la casa vacía “a nivel nacional y provincial sería una locura”.
Este martes, la Cámara de Diputados de la Nación comenzó el tratamiento de la reforma de la Ley de Alquileres, que fue sancionada en 2020 y que generó los efectos contrarios a los que se buscaba: los valores se aceleraron y la oferta es insuficiente para cubrir la demanda que existe.
Desde San Luis, las inmobiliarias mostraron expectativas por los cambios y esperan que con ellos “se pueda llegar a solucionar” la realidad del sector. Los dos ítems de los que esperan variantes sobre el tiempo de los contratos (buscan que vuelvan a ser de dos años) y que las actualizaciones vuelvan a ser determinadas por las partes.
“Lo único que pretendemos es que se modifiquen esos dos puntos. Hay instituciones de otra naturaleza que han pedido derogar la ley”, transmitió el presidente de la Cámara del Colegio de Martilleros en San Luis, Fernando Olcese.
En diálogo con El Chorrillero explicó que San Luis tendrá participación en el tratamiento en el Congreso por medio del Consejo Federal de Colegios Inmobiliarios (Cofesi).
“Consideramos que una vez que esté aprobado se liberará un poco más el mercado”, planteó.
A nivel nacional estimaron que desde la implementación de la normativa los valores de los alquileres incrementaron más de un 140%.
“No lo tenemos muy estudiados, pero no estamos lejos del porcentaje”, sostuvo Olcese en relación al panorama local. Dijo que las cifras son reales porque “mientras mayor demanda exista y menor oferta haya, lógicamente los precios van a aumentar”.
Un ejemplo de la realidad que se vive, es que este mes la actualización de los precios llegó al 55%. Se convirtió en el monto más alto desde que la ley fue sancionada.
“Es el mes que más lleva. Y no lo determinamos nosotros, se rige por el ICL, que va por el IPC y el Ripte”, afirmó.
Al mismo tiempo aclaró que “aumentaron pero no están en los valores que deberían”, y resaltó que “hay cosas que no se están engranando bien y esta es una de ellas”.
A partir de esto, Olcese ahondó en las condiciones del mercado, que venía con problemáticas y la nueva legislación fue el punto culmine.
“Es una situación mas compleja que va más allá”, indicó y advirtió que la actividad no es rentable en el país. Una de las consecuencias de esto, es la falta de propiedades para alquilar.
“Sí tiene que ver la ley y en su momento los tres decretos de necesidad de urgencia que hubo, pero principalmente el retiro de inmuebles el debido a la famosa Ley de Inversiones”, aclaró.
En este punto, explicó que “si una persona invierte 100 mil dólares para que después tenga una rentabilidad de 80 dólares, se pone a pensar y no le sirve” y “por eso lo saca de alquiler y lo pone a la venta”.
Especificó que “los porcentajes de inversión-rentabilidad son los más bajos de la historia” y eso “no justifica la cantidad de dinero invertido”.
“Y a esto le tenés que sumar todo lo que vino después”, precisó en relación a las medidas implementadas por el Gobierno en pandemia y la ley.
Olcese ejemplificó con el costo que tiene pintar un departamento luego de que quede desocupado: “Antes lo solucionabas con el deposito, pero hoy no alcanza”.
Y tuvo en cuenta la situación de los inquilinos que deben “pagan un alquiler de $50 mil, que equivale a 250 dólares, en un departamento que vale 180 dólares”.
“No tiene relación la inversión respecto a la rentabilidad”, resaltó e insistió en que para la recuperación del mercado necesitan “la modificación de la ley”.
Un punto aparte hizo Olcese para referirse a la intención del Gobierno de implementar un impuesto a la casa vacía.
“Es una locura total. ¿Quién determina cuándo la vivienda está ociosa? No lo podés saber o es muy raro poder establecerlo. A nivel personal, eso es una situación medrentosa de obligar a quien no lo quiere poner en alquiler”, expresó.
Y subrayó que sería “lo peor que pueden hacer porque eso alimenta más a que sigan ingresando ventas y no alquileres”.
“Consideramos a nivel nacional y provincial que sería una locura”, finalizó.