El peregrinar de los que fueron bochados en la escuela de Policía: “No tienen derecho a tratarnos de brutos e ignorantes”

Después que muchos aspirantes pusieran a la luz que el proceso de evaluación del Gobierno resultó escandaloso, no le quedó otro remedio que llamar “a una nueva oportunidad”. Fue lamentable, porque el 99% de los interesados no aprobó.

Este lunes se conoció la iniciativa de un grupo de docentes autoconvocados: en tres horarios diferentes atendieron a los aspirantes para darles apoyo gratuito. Se suman más gastos y más sacrificios, pero la mayoría mostró el espíritu de perseverar y poder formarse como penitenciarios o policías.

Un joven de 29 años fue ayer hasta el edificio de Colón y Lavalle para aprovechar una de las clases de apoyo que se brindó en un instituto escolar privado. Venía desde El Trapiche con la única idea de prepararse para la segunda instancia.

Contó que cuando la semana pasada se presentaron a rendir “hubo dificultades con el sistema”, y que además “tardaron como media hora para dar las pruebas”. El material de estudio lo tuvieron que comprar (tres cuadernillos) y gastaron $1600.

“Una de las cuestiones más importante es que había temas que no estaban en el cuadernillo, por ejemplo ¿quién había creado la quiniela?”, señaló en un contacto que mantuvo con El Chorrillero.

La evaluación duró alrededor de 70 minutos, y apenas salieron les informaron que habían desaprobado: “En mi aula que éramos alrededor de 50, ninguno aprobó”.

“Entre todos comenzamos a conversar y coincidimos que nos tomaron cosas que no estaban para ser estudiadas. Un compañero consultó si podía ver la prueba, pero le dieron un no rotundo”, manifestó.

La rectora del ISSP, Ana María Abrahím hizo declaraciones a los medios, donde advirtió que uno de las facultades a modo general fue “la carencia de comprensión lectora” de los postulantes. Sostuvo que en algunos casos los interrogantes apuntaban a cuestiones gramaticales (reglas ortográficas). “Se quedaron con el texto y no en lo que se basaba el examen”, dijo.

También aclaró que el Gobierno busca a “los mejores” y que por eso se “resalta el orden de mérito”. Tanto es así que el ministro de Seguridad, Luciano Anastasi lo escribió en twitter: “Los puntanos necesitamos que ingresen los mejores hombres y mujeres y por eso adoptamos el criterio de elaborar un orden de mérito académico, en base a los resultados de las evaluaciones”. Felicitó a “los alumnos que aprobaron” porque ellos “encabezarán ese orden de mérito”.

“Vamos a respetar el esfuerzo que realizaron y daremos otra oportunidad a quienes no alcanzaron el objetivo”, insistió.

“Es una falta de respeto para quienes desean progresar académicamente. Nos podemos equivocar como cualquier ser humano, pero eso no les da el derecho a humillarnos. Literalmente nos trataron de brutos e ignorantes”, apuntó el joven.

Consideró que todos los desaprobados son “víctimas de un sistema que falló, y que para no admitirlo llegaron a matar el sueño de muchos chicos”.

“Como institución no fue serio todo lo sucedido. La directora debe una disculpa”, señaló al mismo tiempo.

Trajo como ejemplo todos los que viajaron del interior: “Dejamos muchas cosas para venir, nos organizarnos porque tuvimos que alquilar un lugar para quedarnos”.

La iniciativa para ayudar a los desaprobados que solo usaron las redes sociales para expresarse se orienta en los temas que evaluará la institución: Lengua, Historia, Geografía y Área de Expresión Oral y Escrita.

El profesor Gustavo Rodríguez Mortara es uno de los organizadores y quien estuvo al frente de las clases de hoy, que fueron muy concurridas. Se repetirán en las semanas siguientes, y los interesados pueden acceder de manera presencial o virtual.

No se sabe cuándo se tomará la nueva prueba, y tampoco si está dirigida solo a los que desaprobaron o también a aquellas personas que estaban aptas y que no se presentaron.

Los números oficiales son los siguientes: 12.954 fueron los inscriptos iniciales para ingresar al Instituto Superior de Seguridad Pública; de esa cantidad, 7.185 cumplieron con los requisitos formales y quedaron habilitados para rendir. Finalmente asistieron 3.329, pero solo aprobaron 29 personas.