SAN LUIS
Fuerte denuncia del hijo del hincha muerto: “Veo que una persona cae desplomada y arriba se le pusieron 15 policías mientras lo golpeaban, era mi papá”
El ex líder de la barra brava, Pablo Morcos falleció durante los enfrentamientos con la Policía en el Estadio Juan Gilberto Funes. El hijo brindó detalles de cómo ocurrieron los hechos y aseguró que los efectivos lo amenazaron cuando fue a verificar si era su progenitor.
Lucas Morcos denunció públicamente en el programa La Mañana de Dimensión sobre la trágica muerte de su padre y narró lo ocurrido en la noche del miércoles mientras se disputaba un partido entre Vélez e Independiente Rivadavia por la Copa Argentina en el estadio Juan Gilberto Funes en la ciudad de La Punta.
Contó que llegaron al estadio siete minutos después iniciado el partido y en la puerta había demora para ingresar porque permitían que accedan cinco personas a la vez.
“Había más de 2 mil personas en la entrada lo que provocó un enfrentamiento entre los hinchas y los Policías que después se calmó”, explicó Lucas.
Dijo que había tres controles y en ese momento se separó de su padre: “Mientras estábamos ahí vimos cómo la Policía le pegaba a un menor de edad, también de Mendoza”.
“Cuando estaba entrando a la cancha veo que una persona cae desplomada y arriba de él se le pusieron 15 policías, teniéndolo de todos lados, yo en ese momento no sabía, pero en mi papá”, describió.
El joven ingresó a la cancha y en el entretiempo tres chicos le avisaron de que “la Policía había matado a un hincha”.
“Al salir del estadio había muchos policías en ronda cubriendo el cadáver. Me acerqué y le dije que me parecía que era mi papá, entonces me pidieron el documento y me negaron que era mi viejo”, sostuvo.
Y continuó: “Viene otro efectivo y me dice que era un hombre que se había caído de la bicicleta. Reaccioné y dije que no me tome el pelo entonces me amenazaron diciendo ‘tómatela para adentro si no vas a terminar al lado de él’”.
En este punto, Lucas aseguró que pudo reconocer que era su padre por las zapatillas ya que el cuerpo estaba cubierto con una tela blanca.
“Lo que me acaban de decir acá en la Fiscalía es una muerte respiratoria, es obvio que ninguna persona te va aguantar 700 kilos encima. Ni a un perro lo mataron como lo mataron a mi papá”, apuntó durante la entrevista.
Sostuvo que su progenitor no portaba armas de fuego y que no había consumido estupefacientes, solo que bebieron unas latas de cerveza.
“Sin duda lo mataron porque yo lo vi. Aún no sabemos si accionaremos legalmente porque la verdad no podés ganarle al Estado”, concluyó.