Basilio Novello denunció al empresario Carlos Ahumada por defraudación y asociación ilícita
El abogado Marcos Juárez pedirá la imputación y la declaración indagatoria del empresario, su hija, la ex esposa y un empleado. Sostiene que es una estafa multimillonaria
Este miércoles, un Tribunal de Impugnaciones resolvió la competencia de una causa que data desde finales de 2020. Se trata de una denuncia que hizo el dueño de Radio Popular, Basilio Novello contra el empresario Carlos Ahumada Kurtz por defraudación.
La Justicia determinó ahora que la investigación deberá llevarse adelante en el fuero provincial.
El 30 de diciembre de 2020, Novello había realizado la denuncia penal por un fraude en su perjuicio. Todo comenzó en 2018 con un préstamo que le hizo a Ahumada Kurtz a cambio de una garantía hipotecaria.
El abogado Marcos Juárez, que representa al dueño de la emisora explicó que se trató de una importante suma que no fue devuelta y una vez que venció el plazo, el monto “pasó directamente a un cúmulo capital que tenía que aportar Basilio Novello para ser socio en el 50% de PESA”, la planta de energía solar fotovoltaica.
“Fue haciendo aportes de capital, pagando facturas, VEPS de importación porque los insumos venían de China, transferencias bancarias y hasta le entregó una camioneta 4×4. Pero lejos de hacerlo socio, Ahumada logró desapoderarlo de la suma multimillonaria”, describió el letrado en declaraciones a El Chorrillero.
Casi en simultáneo a la acusación, el empresario formuló otra denuncia pero en el fuero Federal de Buenos Aires, y recayó en manos del juez Ariel Lijo. A raíz de eso, se pidió que la causa por estafa pase al mismo ámbito.
En la presentación expuso que la certificación de la firma del escribano Marcelo Celi Marchetta (donde aparecía el acuerdo) estaba “falsificada porque no se había rubricado en la fecha que dicen ni tampoco en San Luis”.
Novello y el abogado Juárez.
Juárez dijo que la Justicia reclamó el instrumento que no sería real, pero Ahumando Kurtz nunca lo presentó. Apuntó a su vez que en la denuncia “reconoció que tiene una deuda, nada más que no aclara los montos”.
En San Luis la causa llegó a manos de Marcos Flores Leyes, quien en ese entonces dijo que correspondía investigar a la Justicia Federal. Esto fue descartado ahora.
“Se armó una contienda de competencia y la Justicia de San Luis a través del Tribunal de Impugnaciones en el día de la fecha dijo que no. Coincidió que se debe investigar acá”, relató Juárez.
Expuso además que el fraude en concreto inició en julio de 2019, cuando Ahumada Kurtz “bajo el pretexto de hacerlo socio en PESA le fue sacando pagos, capital, inversiones en máquinas para formar la planta y vehículos”.
Al mismo tiempo, detalló que la acusación es por asociación ilícita e involucra también a la hija del empresario, Ana Lucía Ahumada Gurza, a la ex esposa, Cecilia Gurza González y a un empleado, Antonio Martínez Ocampo, que es el único que está viviendo en la ciudad de San Luis.
Fundamentó esto en que “no solamente forman parte de PESA, sino que firmaron un acta de Asamblea General Ordinaria donde autorizan a tomar el préstamo por parte de Basilio y también al rescate mensual”.
El abogado insistió en que la Justicia debe actuar porque “estamos hablando de una estafa multimillonaria”. Y tuvo en cuenta que “Ahumada ya tiene condenas en México por fraude en contra del Estado nacional, después fue investigado por Estudiantes cuando fue el gerenciador, también en Talleres”.
“Tiene muchísimos antecedentes de estafa. Y cuando nosotros hacemos la investigación patrimonial de él y todos lo integrantes, no tienen ni una bicicleta a su nombre. Pero viven una vida de ricos”, advirtió.
A eso sumó que “la dirección registrada en AFIP es falsa”. Contó que figura un edificio, pero el piso donde dice residir no existe.
En este escenario, adelantó que mañana pedirán la imputación por el delito de asociación ilícita y la declaración indagatoria y de Ahumada Kurtz, sus familiares y el empleado implicado.
El empresario nació en Córdoba y a los 9 años se fue a vivir a México. En 2004 se filmó entregando dinero a políticos cercanos al entonces candidato a presidente de México, Andrés López Obrador. Por eso estuvo preso.
En 2007 retornó a la Argentina y trabajó en el fútbol. Primero gerenció a Talleres de Córdoba y tras su llegada a San Luis pasó por Juventud Unida Universitario y Sportivo Estudiantes.