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Sispro: el sistema de monitoreo provincial del cual no se conocen estadísticas o cifras sobre los resultados

El Gobierno exhibió las bondades sobre los registros fílmicos y los dispositivos instalados en distintos puntos de la provincia. Sin embargo, no informaron los robos que permitieron frustrar, la cantidad de causas que solucionaron o las personas a las que asistieron. En paralelo, los sanluiseños siguen padeciendo la inseguridad.

foto ansl
El sistema es articulado entre los ministerios de Seguridad y de Ciencia y Tecnología.
Actualizada: 16/08/2022 00:05
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577 cámaras públicas son las que tiene toda la provincia para el sistema de seguridad. Es decir, un dispositivo cada 900 habitantes aproximadamente. Son los que forman parte del Sistema Inteligente de Seguridad Provincial (Sispro). Entre sus características, desde el Gobierno destacan la prevención del delito, pero ¿es eficaz o ha logrado los objetivos que busca?

No hay certezas sobre eso. Esto se desprende de que no existen estadistas sobre su funcionamiento ni datos públicos sobre los resultados. A eso se suma, que cada vez son más los puntos de San Luis que advierten hechos de inseguridad y que una vez perpetrados, no son resueltos. Esto es, no recuperar sus pertenencias ni detienen a los delincuentes.

Este fin de semana, la ANSL publicó un informe sobre el Sispro donde detallan en qué consiste el sistema, la aparatología con la que cuenta, el material fílmico obtenido y el personal que se encuentra monitoreando la provincia.

Destacaron que “mejora la prevención de delitos, ayuda a resolver casos y contiene a personas en riesgo”.

En junio Anastasi inauguró uno de los centro de monitoreo de San Luis.

Sin embargo, no difundieron información sobre los hechos que lograron frustrar o impedir, las causas que fueron resueltas a partir de sus aportes y la cantidad de sanluiseños que fueron contenidos tras estar en riesgo.

El sistema fue articulado entre los ministerios de Seguridad y de Ciencia y Tecnología. Y además de los registros fílmicos “contiene, a través de llamados de emergencia, a personas en situación de riesgo, tanto por intentos de suicidio, violencia de género o vulneración de derechos a menores”. Sobre esto tampoco se conocen los números de acciones.

Dos casos recientes que expusieron las falencias en el dispositivo de monitoreo con que cuenta la Provincia fueron las desapariciones de Guadalupe Lucero (14 de junio de 2021) y Osvaldo Hernández (15 de mayo). No existen imágenes que pudieran dar alguna pista sobre el paradero de ambos.

El Sispro tiene cuatro centros, dos en San Luis, uno en Villa Mercedes y el restante en Merlo. Prestan funciones 279 personas civiles, unos 60 efectivos de la Policía con presencia permanente en cada guardia.

La única cifra que detallaron desde el Gobierno fue que durante el año realizaron 89 informes especiales que “tienen la convergencia de todos los sistemas en un análisis muy minucioso, que se entrega con una evidencia objetiva a cualquier división específica de la policía o al Ministerio Público Fiscal”.

Los comercios son uno de los sectores que exponen el desamparo de las fuerzas de seguridad. Incluso desde el Gobierno les pidieron que aporten sus cámaras de seguridad para formar parte del sistema de vigilancia. Y así, en muchos casos de los que han sido víctimas deben aportar su propio material.

Luciano Anastasi, Alicia Bañuelos y Alberto Rodríguez Saá.

Sin ir más lejos, este domingo desde una estética en la ciudad, ubicada en Caseros y Lavalle (a cuatro cuadras de una de las oficinas del Sispro) difundió en redes cómo los ladrones marcan un comercio para intentar robar más tarde.

Las imágenes desde dentro del local muestran que cuatro personas miran por las ventanas, intentan abrir una de ellas y dejan una marca en uno de los vidrios. Todo eso sucedió a plena luz del día. Ahora la comerciante busca dar con el paradero de esas personas para poder denunciarlos.

En paralelo, vecinos de varias localidades han realizado en las últimas semanas asambleas y concentraciones para pedir respuestas en materia delictiva. Los robos no cesan y tampoco tienen soluciones después de ser sufrirlos.

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