Vendedores ambulantes se movilizaron para hacer reclamos al intendente Tamayo
Se concentraron cerca del mediodía en calle Rivadavia y Junín con una bandera cuestionaron: “60 millones de pesos es el precio que le pusiste a la dignidad, al progreso y al derecho a trabajar que nos quitaste a los trabajadores del Paseo del Padre”.
Los manifestantes fueron trabajadores que en su momento tuvieron puestos en Paseo del Padre, luego perdieron todo a causa de un incendio y fueron desplazados para la reapertura de la galería.
Ante la creación de 10 boxes, que pueden dividirse en 4 puestos, en total 40, muchos vendedores ambulantes quedaron sin la posibilidad de trabajar. La obra tuvo un costo cercano a los 60 millones de pesos. En su momento, comerciantes acusaron que hubo competencia desleal a la hora de elegir los puesteros y se encadenaron exigiendo que les otorguen otro espacio físico donde ejercer su labor.
Hoy, se congregaron nuevamente para exigir respuestas. “Se me quemó toda la mercadería. La Municipalidad no dio la cara y hoy no tengo puesto ni en Paseo del Padre ni en Galería Chacabuco. Tengo hijos y uno con discapacidad, tengo que trabajar si o si”, dijo una de las manifestantes, Juana De La Cruz, en declaraciones a El Chorrillero.
El resto de los comerciantes coincidían en que quieren un trabajo digno.
Reclamaron que la situación “es indignante para un ser humano que le gusta trabajar y ganarse el pan con el sudor de su frente cada día”.
“No robamos, queremos trabajar dignamente”, explayaron.
Por último, denunciaron que personal de policía municipal intentó secuestrar sus productos para venta durante la manifestación.