"En San Luis no me escuchan": pidió ayuda en la puerta de la Casa Rosada para que operen a su mamá

Beatriz lleva 9 meses de padecimiento. Fue operada en el Policlínico Regional de San Luis, de vesícula, pero terminó con una grave infección intestinal. La familia denunció que en la intervención le dejaron adentro una gasa de 30 por 30. Su salud empeoró con el paso de los meses y estuvo internada en grave estado en el Hospital “Ramón Carrillo”.

Su hija realizó reiteradas protestas porque el cuadro de su madre nunca mejoró. Cortó el tránsito sobre la Autopista de las Serranías Puntanas para que el Gobierno de Alberto Rodríguez Saá autorice $3.300.00 para una intervención en la Fundación René Favaloro. Pero no la escucharon.

Hoy se fue hasta la Casa Rosada para que alguien comprenda que la situación es grave. Allí fue con sus hijos y con carteles, pero “no hicieron nada, no hay respuesta ni solución”, contó Martina Zamora en diálogo con El Chorrillero.

“Un día más que pasa y nadie soluciona nada ¿Dónde está la secretaría de la Mujer? Ayelén Mazzina, mi mamá también es mujer y necesita ayuda”, pidió en un posteo por las redes sociales.

“Lo llamaron a mi papá desde el Carrillo para decirle que la iban a trasladar al Hospital Italiano porque en Favaloro no hay cama”, relató. En medio de la espera, la burocracia o la falta de preocupación de las autoridades sanitarias de la provincia, la mujer sigue en estado crítico: “Está completamente dormida, le están poniendo morfina cada una hora”.

El 17 se cumplirá un mes desde que está internada en el Hospital Fernández.

“Cuando en el Favaloro estaba la cama, no nos autorizaron el dinero porque supuestamente el Gobierno no puede hacer un depósito por esa cantidad de dinero en un periodo tan corto de tiempo. Ahí nos dijeron que la obra social directamente no lo había solicitado. Si ellos (por la gestión de Rodriguez Saá) lo hubieran puesto, un peso sobre el otro, no estaríamos en esta situación”, señaló Martina.

Al mismo tiempo aseguró que también a su mamá “quisieron afiliarla a Dosep para que cubra los gastos, pero como eso tarda, pasó todo este tiempo”.

“No nos ayudan con nada. A mi papá le dieron un paquete de yerba, uno de azúcar y uno de jabón. Inclusive el viceministro le dijo que hasta les habían mandado pasta para lavarse los dientes. Es una vergüenza que nos digan esas cosas. Es un manoseo el que siguen haciendo con mi mamá”, dijo al final.