La Cámara de Diputados aprobó por unanimidad el proyecto que reconoce la Lengua de Señas
Una iniciativa largamente pedida por organizaciones de la comunidad sorda tuvo hoy media sanción por unanimidad.
Con la presencia en el recinto de una intérprete de señas del plantel que tiene la Cámara de Diputados, que participó durante todo ese debate transmitiendo en ese lenguaje lo que se estaba diciendo, el cuerpo dio media sanción, por 229 votos, a un proyecto que reconoce a la Lengua Señas Argentina (LSA) en todo el territorio nacional, una iniciativa reclamada desde hace años por organizaciones de personas sordas.
El texto que llegó al recinto fue producto de un consenso entre propuestas impulsadas por diputados de distintos partidos.
A través de la iniciativa se reconoce a la LSA como una lengua natural y originaria que conforma un legado histórico inmaterial como parte de la identidad lingüística y la herencia cultural de las personas sordas en todo el territorio de la Nación Argentina, y que garantiza su participación e inclusión plena, como así también de las personas que, por cualquier motivo, elijan comunicarse en dicha lengua.
En cuanto a su definición, se señala que “la LSA posee una estructura gramatical completa, compleja y distinta del castellano” y “al ser visual, es completamente accesible desde el punto de vista perceptual para las personas sordas, como así también para todas las personas”.
Serán organismos legítimos de consulta sobre la LSA aquellas organizaciones constituidas íntegramente por personas sordas que las representen en todo el territorio de la República Argentina y que se encuentren oficialmente constituidas e inscriptas con reconocimiento de los Estados nacional, provincial y municipal.
El proyecto, que ahora deberá ser tratado en el Senado, faculta al Poder Ejecutivo para “fomentar e impulsar en los distintos ámbitos de su competencia el acceso y el uso de la LSA de todas las personas que, por cualquier motivo, elijan comunicarse en dicha lengua”.
Esto será bajo los objetivos de tener una accesibilidad efectiva y plena a la vida social; eliminar barreras comunicacionales y actitudinales; equiparar oportunidades tendientes a impulsar y fortalecer la independencia, autonomía personal y toma de decisiones; y diseñar y ejecutar estrategias que aseguren la accesibilidad comunicacional en todas las políticas públicas dirigidas a la sociedad.
El reclamo histórico de la Confederación Argentina de Sordos tuvo su correlato también con una campaña de recolección de firmas lanzada a través de la plataforma de Change en la que lleva reunidas más de 130.000 adhesiones en reclamo de la ley.
“Los ciudadanos sordos deben estar integrados y esta ley promueve a la lengua de señas como un verdadero nuevo ´idioma´. Bien”, celebró el diputado puntano Claudio Poggi tras la aprobación de la iniciativa en un posteo en sus redes.
El proyecto
El proyecto tiene por objeto reconocer a la LSA como una lengua natural y originaria, que conforma un legado histórico inmaterial como parte de la identidad lingüística y la herencia cultural de las personas sordas, y que garantiza su participación e inclusión plena, como así también de las personas que, por cualquier motivo, elijan comunicarse en ese lenguaje.
El dictamen señala que se entiende a la lengua de señas como aquella que se transmite en la modalidad visoespacial y explica que la LSA posee una estructura gramatical completa, compleja y distinta del castellano.
"Al ser visual, la LSA es completamente accesible desde el punto de vista perceptual para las personas sordas, como así también para todas las personas que, por cualquier motivo, elijan utilizar la LSA para comunicarse, transmitir sus deseos e intereses, informarse, defender sus derechos y construir una identidad lingüística y cultural positiva que les permita participar y trascender plenamente en todos los aspectos de la vida social", sostiene el dictamen.
También establece que serán organismos de legítima consulta sobre la LSA aquellas organizaciones constituidas íntegramente por personas sordas que las representen en todo el territorio de la República Argentina y que se encuentren oficialmente constituidas e inscriptas con reconocimiento de los Estados nacional, provincial y municipal.
El proyecto tiene por objeto reconocer a la LSA como una lengua natural y originaria, que conforma un legado histórico inmaterial como parte de la identidad lingüística y la herencia cultural de las personas sordas, y que garantiza su participación e inclusión plena, como así también de las personas que, por cualquier motivo, elijan comunicarse en ese lenguaje.