El 60% de los hogares de San Luis tienen como máximo un ingreso de $100 mil

Una forma de conocer el actual panorama social y económico del país y de San Luis es a través de las cifras que se desprenden de los últimos informes del Instituto Nacional de Estadísticas y Censo (Indec).

Una de las conclusiones a las que se arriba, refleja una preocupante realidad para los hogares puntanos: 6 de cada 10 registran un ingreso de $100 mil como máximo.

Se tratan de números correspondientes al primer semestre del 2022 y que se circunscriben al distrito Gran San Luis, es decir, la capital, La Punta, Juana Koslay y El Chorrillo. A partir de allí se puede proyectar hacia toda la provincia.

Concretamente, de los 80 mil hogares relevados, un 58,9% (unos 47.120) percibe haberes de hasta los $100 mil, según informaron desde la dependencia nacional a El Chorrillero tras un pedido de acceso a la información pública.

En este sentido hay que agregar que el Ingreso Total Familiar (ITF) promedio de los hogares fue de $103.587. El mínimo de $5400 y el máximo de $599.000, mientras que aquellos sin ingresos representaron el 1,8%.

Hay que subrayar que durante este periodo la pobreza de San Luis se ubicó en 38,3% y la indigencia en 4,8%. Además, una familia integrada por dos adultos y dos chicos necesitó hasta junio unos $104.217 para no ser considerada pobre y $46.525 indigente.

Ahora, cuando el análisis se profundiza surgen otras estadísticas alarmantes ya que unos 81,4% percibe menos de $150 mil y solo una pequeña porción de sanluiseños presentan mayores ingresos.

¿Cómo están compuestos los ingresos puntanos?

| El 6,3% percibe de $0 a $24.999.

| El 16,3% percibe de $25 mil a $49.999.

| El 18,8% percibe de $50 mil a 74.999.

| El 17,5% percibe de $75 mil a $99.999.

| El 22,5% percibe de $100 mil a $149.999.

| El 10% percibe de $150 mil a $199.999.

| El 7,5% percibe de $200 mil a $299.999.

| El 1,3% percibe de $300 mil a $399.999.

| El 1,3% percibe de $400 mil a $599.000.

Un reciente informe publicado por el Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (Cippec) trata de explicar cuáles son las razones de los bajos salarios.

“La recuperación del mercado laboral no alcanzó para retrotraer uno de los problemas más acuciantes del país, la pobreza. Una causa posible es que, aunque los salarios de quienes trabajan en la formalidad mantuvieron su poder de compra, los ingresos de quienes lo hacen en la informalidad cayeron un 10% en los últimos dos años”, indicaron en una nota titulada “Pobreza, empleo y brecha de género: tres claves para pensar el futuro”.

Seguidamente, los autores del ensayo, Rafael Rofman y Manuel Mera, precisaron que otra de las razones es la informalidad ya que se estima que del total de la fuerza de trabajo “un 45%” se desempeña bajo esta modalidad.

“Una causa central de los problemas de empleo en Argentina es la falta de crecimiento económico, que se traduce en la falta de oportunidades laborales en empleos de alta productividad. Sin mayor demanda laboral y nuevas oportunidades de trabajo no se puede derribar barreras de ingreso. Pero una reactivación económica sin una estrategia de promoción del empleo presentará resultados insuficientes”, agregó el Cippec.

Otra de las causas que consideraron importante es la “baja terminalidad educativa” debido a que “solo el 50% de los y las adolescentes del país termina el secundario en tiempo y forma”.

También indicaron que las barreras de género contribuyen al empeoramiento del contexto laboral: “Las mujeres tienen una participación en el mercado de casi 20 puntos porcentuales menos que los varones, al mismo tiempo que su tasa de desempleo es algo superior. Sus trayectorias laborales son más inestables, con menos horas diarias de trabajo y en sectores peor remunerados, lo que resulta en menores ingresos, más informalidad”.