Italia: al menos 59 muertos tras el naufragio de una embarcación que transportaba migrantes
Las autoridades italianas informaron que al menos 59 personas murieron y 80 sobrevivieron luego de que la embarcación en la que se transportaban naufragara en el sur de Italia. Los afectados provenían de países como Afganistán, Irán y Pakistán, en un intento por refugiarse en Europa. La primera ministra Giorgia Meloni prometió acciones contra la migración irregular.
Decenas de cadáveres dispersos a lo largo de una playa de la costa del sur de Italia. Es el escenario de una nueva tragedia marcada por el intento de miles de refugiarse en Europa, tras huir de países de África, Asia y Oriente Medio.
Las autoridades encontraron al menos 59 personas muertas y 80 sobrevivientes luego de que naufragara la embarcación en la que intentaban llegar a territorio italiano.
Sin embargo, no se descarta que el número de fallecidos aumente. Entre las víctimas mortales se encuentran varios niños, incluido un recién nacido.
Provenían de países como Afganistán, Irán y Pakistán, naciones sumergidas en conflictos, violencia y condiciones precarias.
El fatídico hundimiento se produjo cuando el frágil bote de pesca en el que se trasladaban chocó contra unas rocas y la barca se partió por la mitad, según el relato que entregaron los equipos de salvamento.
“Rezo por cada uno de ellos, por los desaparecidos y por los demás migrantes supervivientes", remarcó el papa Francisco este domingo 26 de febrero, tras conocer lo ocurrido.
Los hechos se produjeron cerca del balneario de Steccato di Cutro, en la costa este de Calabria, la región que forma la punta de la bota de Italia.
Meloni promete acciones contra la migración irregular
Luego de ser informada sobre el naufragio, la primera ministra de Italia, Giorgia Meloni, que dirige el Gobierno más ultraderechista de la historia desde la era de Benito Mussolini, advirtió que su Administración tomará más medidas para frenar los cruces irregulares.
“El Gobierno está comprometido a evitar las salidas (de migrantes) y con ellas el desarrollo de estas tragedias, y lo seguirá haciendo. En primer lugar, exigiendo la máxima colaboración a los países de salida y de origen”, señaló un comunicado de su oficina.
La premier también subrayó que expresa su “profundo pesar por las muchas vidas humanas truncadas por los traficantes de personas".
Este hecho se registra justo en momentos en que Roma eleva su apuesta por controlar el flujo de migrantes que intentan alcanzar el territorio europeo sin autorización.
El pasado jueves 23 de febrero el Parlamento italiano aprobó un nuevo decreto que modifica la forma en que pueden proceder las operaciones de distintas ONG.
Entre las controversiales medidas está la limitación del número de rescates que puede realizar una organización humanitaria. En este sentido, obliga a que la embarcación pida a las autoridades la asignación de un puerto, luego de realizar un primer salvamento y se dirija a ese lugar sin desviarse a responder a más navíos que puedan estar en peligro.
Una normativa que, según la ONG española Salvamento Marítimo, contraviene el Derecho Internacional.
Además, las Organizaciones sin ánimo de lucro destacan que desde hace semanas las autoridades italianas desvían a sus barcos por toda la costa nacional, incluso en el centro-norte del país o la costa del mar Adiátrico. Medida que los obliga a tomar largos trayectos de hasta 5 días para desembarcar a los migrantes, en vez de direccionarlos a sitios próximos a las zonas donde se produce un rescate.
En caso de incumplir las estipulaciones gubernamentales, los organismos de salvamento se exponen a sanciones de 50.000 euros para los barcos y hasta 10.000 euros para el capitán y el propietario del buque, así como a la detención del buque y el embargo del mismo si se presenta una reincidencia.
Pero en medio de las estrictas normas y de situaciones precarias que no cesan en los países de origen, el flujo de migrantes aumenta. Según datos del Ejecutivo italiano, en lo corrido de 2023 más de 4.000 personas han llegado al país a través del Mediterráneo central.
Un incremento significativo frente a los 1.700 registrados durante el mismo periodo de 2022. En todo el año pasado arribaron más de 100.000 personas a las costas italianas mediante estas rutas. (France 24)