Santiago Rodríguez, el puntano que es la joya de Instituto y que buscará ganar en la Bombonera, palpitó la previa con El Chorrillero

Santiago Rodríguez tiene 25 años. Nació en Arizona y está viviendo un sueño. Cuando era chico veía los partidos de Primera División con su abuelo y anhelaba llegar algún día a debutar en la máxima categoría del fútbol argentino.

Estuvo cerca de bajar los brazos, pero el esfuerzo y la perseverancia siempre fueron algunas de sus cualidades. A sus 17 años, lo descubrieron en los Juegos Intercolegiales representando a la Escuela Malvinas Argentinas de su localidad, en una cancha de fútbol 5.

Anotó cuatro goles en semifinales y la misma cantidad en la final. Su juego cautivo al ex futbolista Néstor “Pucho” Gutiérrez que lo llevó a Sportivo Estudiantes. En cuestión de días, pasó de un playón a la B Nacional.

En poco tiempo se volvió clave en el plantel Albiverde. Fue cedido a Almagro y luego llegó a Instituto.

A Córdoba arribó en silencio, pero terminó haciendo mucho ruido. El “11” fue clave en el ascenso a la Liga Profesional y ya en la máxima es una de las figuras del equipo. Marcó un gol ante Newell´s y demostró adaptarse rápido a la categoría con la que soñó llegar desde pequeño.

“Me encuentro en un buen momento, pero sé que puedo dar mucho más. Significa mucho en mi vida, es algo que he soñado mucho desde chico, pero lo tomo con tranquilidad y trato de disfrutar”, le mencionó Rodríguez a El Chorrillero.

Santiago es zurdo, hábil y potente. Él se caracteriza como un jugador que “va para adelante siempre con la intención de lastimar al rival lo más que se pueda y ser lo más certero posible en las decisiones cerca del arco”.

Junto a Pablo y Santiago Solari son del mismo pueblo. Los une la amistad y están orgullosos y felices representando a Arizona y a la provincia en Primera División.

El pasado fin de semana, Rodríguez estuvo en boca de todo el mundo futbolero porque habló sobre el estadio de Boca, a quienes enfrentará este domingo desde las 19:15 y dejó una provocadora frase: “Dicen que la Bombonera ´late´, vamos a ver si tiembla”.

Sin embargo, a este medio el delantero aseguró que todo fue sacado de contexto. “Jamás le faltaría el respeto a Boca, jamás lo haría con ningún club. Soy respetuoso con eso y lo manejo bien”, aseguró.

Y agregó: “Dije que la Bombonera late y un amigo fanático me dijo que me fije eso y lo disfrute. Nada más”.

Lo cierto es que en La Bombonera, el puntano que sueña con seguir creciendo como futbolista, buscará continuar con su gran rendimiento y llevar a su equipo a la gloria.