En un año el pescado tuvo un alza de más del 170% y en el último mes subió un 15%

Como cada año para estas fechas, quienes creen en las tradiciones de la Iglesia Católica de no comer carne cada viernes durante la Cuaresma, optan por consumir pescados y la demanda de este producto aumenta significativamente, pero en esta ocasión el panorama en San Luis es distinto por la fuerte suba interanual que registró.

En este difícil contexto inflacionario, El Chorrillero realizó un relevamiento por pescaderías de la ciudad para saber cómo afectó el alza de los precios en el consumo de la gente. En líneas generales, se detectó que el producto en general hace un año valía un 170% menos que en la actualidad. Los comerciantes estiman que puede haber otro reajuste en Semana Santa.

La “Pescadería Exclusiva” confirmó que hace 12 meses la merluza costaba $700 y ahora su precio oscila en los $1900, es decir, que tuvo un alza del 171,43%.

Lo mismo sucedió con el salmón que estaba a $4 mil y ahora llega a $12 mil, significando un incremento de $8 mil. La diferencia porcentual marcó un 200%.

Los langostinos tuvieron un alza del 100%, ya que su valor era de $3 mil y ahora $6 mil.

En la misma línea, reconocieron que los incrementos se dan semana tras semana: “Estaba $1600, luego lo subieron a $1700, después $1800, ahora $1900. En una semana subió casi un 6%”.

Desde el local consideraron que la demanda ha mermado poco porque, si bien el pescado se caracterizó por ser más caro que la carne y el pollo, en la actualidad los precios son casi similares.

“Los aumentos son por la inflación, por la suba de combustibles. Aparte de eso, no te entregan lo que solicitás porque pedís 20 cajas y te traen tres, encima son subas del 2% o 3%”, explicaron.

El propietario de la “Pescadería Atlántida” sostuvo que “los precios siguen subiendo y la semana que viene habrá más aumentos. Esto es constante porque hace siete días aumentó $80, hace quince $50, esto se da sobre todo en la merluza que es lo que más se vende”.

“El marisco subió un 15%, pero por ejemplo el langostino no aumentó, pero el camarón si, el calamar entero no incrementó, pero el tubo de calamar si y en el caso de la merluza tuvo un alza de un 15 % en un mes”, describió.

De la misma manera, ahondó en las subas de un año al otro: “Tenía el filete $1 mil el kilo y este año $1600”.

Y agregó: “Esa es la diferencia de la inflación porque los precios suben, pero el comerciante no está teniendo el mismo rédito que un año atrás, porque marcábamos con un 80% pero ahora no, con el 50% como mucho”.

Reveló que prefiere vender el producto a un precio más económico porque de lo contrario la gente no lo adquiere: “Lo que pasa que si está caro no lo compran y vas al supermercado te venden el pescado congelado a $1300 el kilo, pero lo descongelas y es medio kilo. Otras de las cosas que suceden es que te ponen un carro de venta de pescado en la plaza y se complica”.

Dio a conocer que en relación a los precios, los rebozados como los medallones incrementaron un 5%.

Por otra parte, destacó que en su caso, la demanda ha disminuido considerablemente: “En esta época vendía 12 cajones y ahora solo siete”.

En el caso del comercio “Del Vasco Pescadería” coincidieron que la suba de un mes al otro fue de un 15%. Sin embargo, reflejaron que el salmón rosado tenía un valor de $7 mil y ahora vale $9 mil, marcando un aumento del 28,57%.