Comerciantes del centro de San Luis reclamaron por el avance de la inseguridad

Por Fernanda Gonzales 

En los últimos meses la cantidad de hechos delictivos fue en ascenso y los comercios son uno de los blancos de los delincuentes. Por eso, un grupo de comerciantes se autoconvocaron para reiterar un pedido que lleva cuatro años.

En la reunión realizada este lunes al mediodía, señalaron que la inseguridad se ha potenciado, que el compromiso policial ha decrecido y que constantemente se sienten desprotegidos.

Además, expusieron que en ocasiones han sido amenazados y extorsionados por los ladrones.

También pidieron mayor presencia policial, facilidad para realizar denuncias y propusieron que sus cámaras de seguridad sean integradas al Sistema de Inteligencia de Seguridad Provincial (Sispro). A eso sumaron la reubicación de cámaras de seguridad.

Constantemente los dueños, gerentes y empleados son quienes marcan, persiguen y atrapan a los delincuentes y expresaron que no alcanza con dejar de permitirles el ingreso a los locales.

“Soy comerciante, hemos realizado cinco denuncias por robos continuos, tenemos identificados a los ladrones porque andan todos los días. Los atrapan y al día siguiente lo vemos nuevamente”, comentó el dueño de un local ubicado en el Paseo del Padre.

Y agregó: “Lo que vi en esta experiencia es que hay personas mayores que utilizan a menores y cuando capturan al menor, los efectivos temen llamar a la comisaría”.

Del encuentro, participó el ministro de Seguridad, Claudio Latini e integrantes de la Policía.

“Nos apoyamos para cubrirnos las espaldas, pero las veces que pasó algo no había policías. No tenemos a quien recurrir, no hacemos la denuncia porque es mucho el tiempo que perdemos, optamos por quitarle la ropa y que se vaya y no vuelva más”, contó el gerente de una tienda y añadió: “Cuando pasa el delito no hay nadie, llamamos, nos piden el nombre, el documento y de acá que llegan el ladrón se fue”.

Otro hecho de inseguridad ocurrió en calle Junín y Maipú, donde un delincuente, que constantemente merodea por la zona, le arrebató el celular a una empleada cuando lo estaba atendiendo. Luego, el hombre intentó huir, fue retenido y golpeado por otros comerciantes de la zona.

La dueña de una tienda de calle Colón y Pringles comentó que recibió, por parte de adolescentes, amenazas de robos y que teme por que le rompan la vidriera. “Cuando fui a hacer la denuncia, la misma Policía me dijo que no me valdría de nada”, transmitió.

Los comerciantes coincidieron en que San Luis era un “pueblo tranquilo” y que han perdido esa calidad de vida y que sienten rehenes de la delincuencia.

“Hay muchos que están descreídos de que la Policía nos puede cuidar, descreídos de que esto puede mejorar, están preocupados por el mapa del delito. Se está hablando de tomar la justicia por mano propia, de perseguir al delincuente y eso puede terminar en cualquier cosa”, dijo el presidente de la Asociación de Comerciantes y Trabajadores Independientes, Sebastián Morh.