Padres y docentes decidieron pagar el alquiler en un edificio para que los chicos tengan clases todos los días y dejen de deambular por la ciudad

En la tarde de este miércoles la cooperadora del Colegio Nacional “Juan Esteban Pedernera” convocó a una asamblea que reunió a más de 300 personas. El principal motivo fue transmitir a la comunidad educativa la posibilidad de alquilar un espacio que garantice la presencialidad y que se termine con el deambular de estudiantes y docentes por toda la ciudad.

Son mil estudiantes que están dispersos en tres instituciones, y porque este no es el escenario ideal la cursada es “mitad presencial y mitad virtual”.

Otra vez los padres y tutores demostraron que no piensan quedarse con los brazos cruzados. Después del abrazo simbólico y los reclamos porque el ciclo lectivo no transita con normalidad y las consecuencias las paga el alumnado, es que nació una alternativa.

En medio del dolor porque el colegio centenario “está en ruinas” y porque las tareas de reparación durarán un buen tiempo, es que desde la cooperadora salieron a buscar un lugar que esté ambientado para el dictado normal de clases todos los días. Y lo encontraron.

Hoy contaron que se trata del edificio ubicado en España 74 donde en su comienzo funcionó la UNViMe. Tiene 16 aulas, cuatros baños, tres oficinas y una cocina. El alquiler tiene un costo mensual de $400 mil. “Este precio fue considerado por el propietario que lo bajó bastante, entendiendo la situación. Y la idea es hacer un contrato hasta diciembre, pero con la posibilidad de que si nos entregan antes el colegio, poder salir sin inconvenientes”, señaló la presidenta de la cooperadora, Andrea Barzola, en diálogo con El Chorrillero.

Esta alternativa es la que se llevó a votación y la aceptación fue por mayoría. El otro dato es también llamativo: acordaron que los dos primeros meses del alquiler “serán absorbidos con aportes de los padres, de $2 mil mensuales, y de los docentes, hasta que el ministerio de Educación gestiones las partidas con el dinero que se necesita de abril a diciembre”.

Traducido. Nadie se opuso en “invertir” para la educación de los chicos y condiciones dignas, para los que estudian y los que enseñan. Juntarán para pagar abril y mayo, y poder hacer el traslado de casi la totalidad de los cursos: de primero a cuarto año, todo el turno tarde y el turno noche. “Nos quedarán los 5º y los 6º, para los cuales necesitamos 10 aulas y el compromiso de conseguir un lugar para ellos. Momentáneamente tomarán clases en la Casa de la Cultura”, comentó Barzola.

Ahora el acto que quedó firmada por los presentes será elevada a Educación. “No entraría en la lógica que se oponga de algo que es viable, y que es la voluntad de todos. Estamos garantizando que los chicos van a tener clases todos. Esto va a permitir que la empresa acelere los tiempos, comiencen a trabajar y nos entreguen el edificio como corresponda, para que el último día de clases se dicte como debe ser”, señaló.