X

El dólar agro discrimina muchas economías regionales

El Gobierno, como es habitual, actuó con discrecionalidad mientras los gobernadores, aún los que se mantienen cerca del kirchnerismo como el de San Luis, se mantienen en silencio, sin defender sus producciones.

Foto prensa ministerio de Economía.
Alberto Rodríguez Saá y Sergio Massa.
Actualizada: 23/04/2023 22:39
PUBLICIDAD

La tercera edición del “dólar agro” tiene todas las características que distinguen al kirchnerismo cuando se trata de su relación con el campo, y principalmente con las economías regionales: es discriminatoria, parcializada, discrecional y, en algunos de sus conceptos, incluso inentendible.

No queda claro por qué algunas economías regionales podrán liquidar sus dólares a $300 hasta agosto gracias al Programa de Incremento Exportador (PIE) y otras no, cuando los problemas abarcan a todas. En el caso de San Luis, son pocas las producciones que podrán acogerse al beneficio, entre las que se destaca el maní, que crece en los campos puntanos a riesgo de desnudar los suelos y después es industrializado en Córdoba, dejando poco y nada a la economía local.

Ingresan, además del maní, las cadenas de la pesca, la forestación, los frutos secos, el limón, la lana, las cerezas y los arándanos, las legumbres, el té, el tabaco, la olivicultura y la vitivinicultura, entre las más importantes. Pero quedan afuera otras que mueven la maquinaria productiva de San Luis como el girasol, los lácteos, el algodón y las carnes regionales. También castigaron al Alto Valle porque no incluyeron a las peras y manzanas; al litoral con las naranjas, mandarinas, el arroz, y la yerba mate; mientras que los que producen la cebada y sorgo la vieron pasar de la misma manera.

Así, la promesa de Sergio Massa de incluir a “todas” las economías regionales en el dólar especial quedó desvirtuada por la realidad sin que ningún gobernador (nada se esperaba de Alberto Rodríguez Saá desde su alianza con el kirchnerismo) haya alzado la voz para defender a sus productores. El problema es que no se sabe el criterio utilizado por las autoridades para que ingresen unas y otras queden afuera.

“Resulta relevante entender la heterogeneidad registrada en la productividad, inserción en el mundo y matriz productiva de las distintas cadenas, a los fines de establecer los requisitos y condiciones para la adhesión al programa creado”, indicó con muchas palabras y poca claridad la Secretaría de Agricultura.

La lista completa es la siguiente: figuran las abejas, los salmónidos, muchas posiciones de la pesca, la miel natural, los ajos, las arvejas (en todo tipo de presentaciones), los porotos y otras legumbres, los espárragos, las aceitunas, los garbanzos, los frutos secos, los limones y su aceite esencial, las uvas y pasas, las cerezas y los arándanos, las ciruelas y endrinas, el té verde y negro, el maíz pisingallo, el maní en sus diversas modalidades, incluso su aceite, el aceite de pescado y también el de oliva y el de jojoba, las ceras vegetales, los extractos de carne bovina y algunas preparaciones de pescado, el maíz dulce y el pisingallo, algunas preparaciones alimenticias, los “concentrados de proteínas y sustancias proteicas texturadas”, los vinos y el aguardiente, algunas harinas de carnes y pescados, el tabaco en todas su formas, incluyendo los cigarros y los puros, un amplio abanico de productos forestales, y las lanas.

La discrecionalidad quedó clara cuando el Gobierno publicó otros “requisitos de elegibilidad  para los sujetos que se adhieran al PIE”, lo que le permitió incluso dejar fuera de carrera a empresas exportadoras de este tipo de productos. Estos requisitos son:

Haber exportado en algún momento de los 18 meses inmediatos anteriores a la entrada en vigencia del Decreto 194 de fecha 9 de abril de 2023 mercaderías cuyas posiciones arancelarias de la Nomenclatura Común del Mercosur se consignan en el anexo.

Asumir el compromiso de mantener o incrementar durante la vigencia del PIE la cantidad de puestos de trabajo registrados bajo su dependencia, al momento de la entrada en vigencia del mencionado Decreto 194/23.

Asumir el compromiso de abastecer el mercado local con las mercaderías consignadas en el mencionado Anexo, debiendo mantener o incrementar los volúmenes de abastecimiento.

Cumplir los acuerdos de precios para el mercado local que al respecto establezca la Secretaría de Comercio.

Es decir, el margen de discrecionalidad que tendrán los funcionarios para decidir quién podrá gozar del dólar a 300 pesos y quienes no es casi tan elevado como los niveles de discriminación aplicados para construir el listado de economías regionales.

 

PUBLICIDAD

EN PORTADA EL CHORRILLERO

SUBIR