Distribuidoras de San Luis suspendieron la entrega de productos básicos porque no hay precios de referencia
A pesar de que el dólar registró una baja de $28, los propietarios de los comercios de proximidad continúan con la incógnita de si podrán o no reponer la mercadería. Además, sostienen que no hay desabastecimiento porque “no hay ventas”.
Este miércoles, el dólar libre registró una baja y la venta en el mercado paralelo se redujo a los $467. Sin embargo, distintos sectores de la economía comienzan a paralizar su actividad ante la incertidumbre que genera la falta de precios de referencia como consecuencia de la inestabilidad de la divisa.
Las distribuidoras anoche les comunicaron a los almaceneros de la ciudad de San Luis que a partir de este miércoles no entregarían los productos porque los valores de hoy pueden ser muy diferentes a los de mañana.
“Hay un desorden de precios importante. No se está entregando porque no se asegura el precio. O sea, tenés que pagar en el momento la mercadería sino no te la llevás”, explicó el presidente de la Cámara de Almaceneros de San Luis, Ángel “Cacho” Soria en declaraciones a El Chorrillero.
De este modo, ejemplificó que “si querés comprar en cantidad el pago debe ser en el momento”.
“No tenemos precios y no podemos prever ninguna compra futura porque no podemos”, advirtió.
En este contexto, el presidente de la Federación de Almaceneros de la provincia de Buenos Aires, Fernando Savore, sostuvo que dada la incertidumbre de los costos muchos comercios “tuvieron que tomar la decisión de cerrar" y estimó que la inflación podría acercarse al 12%.
Sobre esto, Soria precisó que hubo negocios donde los proveedores transmitieron aumentos de alrededor del 15%, sobre todo en alimentos.
Contó que esta noche, mantendrán una reunión con las cámaras de distintas provincias del país para abordar la problemática de los cierres de los locales.
“Nuestra posición en San Luis es que no vamos a cerrar ni podemos hacerlo, porque siempre lo decimos: somos un servicio para la comunidad”, remarcó.
Soria descartó la posibilidad de desabastecimiento porque “no hay ventas”.
“Desconocemos cuándo podremos reponer la mercadería y esto incide en la compra diaria de nuestros clientes. Nos preocupa mucho lo que está pasando porque nuestro mes de venta eran los primeros 15 días y con este panorama seguramente se reducirá”, culminó.