VILLA MERCEDES
Poggi se reunió con docentes de la UNViMe y de la UNSL para hablar de las dificultades que hay en la educación
El candidato a gobernador por el lema Cambia San Luis mantuvo un encuentro con profesores que quieren una mejor calidad educativa.
El encuentro con un grupo de docentes universitarios cerró la jornada de actividades de Claudio Poggi, el jueves en Villa Mercedes. El candidato a gobernador por el lema Cambia San Luis tuvo la oportunidad de escuchar cuáles son las necesidades y dificultades que se presentan hoy en la educación superior.
Los profesores enseñan en la Universidad Nacional de San Luis (UNSL) y la Universidad Nacional de Villa Mercedes (UNViMe). Además de interesarse por las políticas que implementará Poggi si el 11 de junio es electo como gobernador de San Luis, le contaron sobre la realidad educativa que experimentan.
“Lo que nos va a sacar de la postergación es el conocimiento, en un contexto social que acompañe. Estoy convencido de eso, y además tenemos recurso humano valioso, que son ustedes”, dijo en el inicio Poggi, que estuvo acompañado por Valeria Lange, que va por la candidata a intendenta, Valeria Lange, y a vice, Rudy Cámera.
Poggi tuvo en cuenta “la decadencia” que vive la provincia como consecuencia de un mal Gobierno: “Estamos luchando contra los que no quieren un pueblo educado. Pero si ganamos se les acaba el poder, la impunidad. Somos miles los que queremos una comunidad con trabajo, educada y no sometible”.
Tuvo en cuenta que el 11 de junio “vamos a decidir el camino a seguir, o continuamos con esta decadencia, donde todo lo que tocamos está mal, o lo cambiamos”.
Advirtió el “desorden” que existe en ámbito educativo y la “falta idoneidad”. Por su parte los docentes le agregaron a eso que no hay capacitaciones, y se quejaron porque “ningún ministro” viajó hasta Villa Mercedes cuando las escuelas fueron destrozadas por la tormenta del 26 de enero.
También se habló de la inseguridad, el flagelo de las drogas y la imposibilidad de acceder a la salud.
“No hay oportunidades de trabajo, y el camino es el trabajo, no un plan social. El empleo público en San Luis subió el 50%, y el empleo privado bajó un 8%. Cuando dejé mi gestión había 750 funcionarios, hoy hay 2 mil, que no han mejorado nada”, añadió.
“En el San Luis que se viene el vínculo con las universidades, la ciencia y la técnica, es clave. No nos podemos dar el lujo de no trabajar de manera coordinada. Hay que hacer una fuerte inversión en desarrollo humano, en la primera infancia y poner en la senda la esperanza, el trabajo y la educación; la modernidad, la industria del conocimiento, las energías renovables. Y pensar cómo vamos atendiendo a esos chicos que se nos quedan”, agregó.
En este punto se detuvo en los números sobre la pobreza infantil: 7 de cada 10 chicos vive en hogares con necesidades básicas insatisfechas. “Es un dato desgarrador que nos condena si no lo revertimos. Por eso es imprescindible el cambio, esos niños tienen que ser los futuros profesionales. Si esto que estamos viviendo se enquista, no llegarán a ser sus alumnos, no van a poder lograrlo”, sostuvo.
Expuso que se enfocará en generar trabajo “para un ascenso social” y conseguir que los padres de esos chicos tengan empleo, y en una política educativa que involucre al niño desde los 3 años hasta el nivel superior, y que retome el valor del mérito. Aquí señaló la construcción de jardines maternales, la obligatoriedad de la salita de 3 años, y la ampliación de la beca al mérito a los 6 mejores promedios del último año del secundario. Esto último como un incentivo económico que les ayude a seguir sus estudios universitarios. También señaló que promoverá la cultura emprendedora.
En la charla, una docente contó cómo se notó la discontinuidad de la política al mérito: “En el primer año los chicos pudieron solventar los estudios porque tenían ese ingreso, luego todo cambió, se desvirtuó”. Al mismo tiempo habló de “la falta de articulación” entre el nivel secundario y la universidad. “Tener un anclaje es fundamental”, coincidieron, para que los alumnos tengan una preparación que les permita afrontar la carrera que elijan. “Los chicos llegan sin poder comprender un texto o resolver un problema, se frustran y abandonan, no siguen. Tiene que haber un cambio, para que ellos sientan el acompañamiento”, expresó.
En algunas ocasiones la UNSL ofreció charlas gratuitas en las escuelas públicas, pero no se pudieron concretar porque no había “autorización” del ministerio de Educación.
También apuntaron que deben “revisarse los programas de estudio” y prestar atención porque hay instituciones donde no se enseña programación, y en otras eliminaron la computación, ambas herramientas tan necesarias para enfrentar el presente y el futuro.