EL CHORRILLERO TV
Stella Esnaola: "Hay intendentes que hacen de los municipios un negocio familiar”
Es candidata a diputada provincial por el sublema Avanzar en el Departamento Ayacucho, dentro de Cambia San Luis.
-Daniel Miranda: eligió Quines como su lugar en el mundo…
-Stella Esnaola: soy de las que se casó y se fue con el marido a otra localidad. Él es de Candelaria. Nos conocimos cuando yo estudiaba acá en San Luis. Pero era muy difícil para él seguir con su actividad en el campo y yo en Villa Mercedes, que era donde mis padres tuvieron farmacia toda la vida. Así que renuncié a la farmacia de mi papá, con todo el dolor del alma. Él siguió un par de años y ya después se dedicó a otra cosa porque él no sostenía la farmacia sin mí. Le parecía que le faltaba algo. Yo comencé a trabajar en Quines. Primero regenteando una farmacia, después tuve la mía durante 15 años hasta que decidí dedicarme a la farmacia social, vendí todo y entré a trabajar en el Hospital de Quines hace ya nueve años.
-Usted conoce el sistema público de salud ¿Cuáles son las demandas? ¿Qué pasa en el hospital en términos de atención a una vasta región como es el departamento Ayacucho?
-En este momento el Hospital de Quines estaría funcionando como un hospital regional porque recae mucha población, gente de muchas zonas aledañas. No solamente de Candelaria, Quines, Luján y San Francisco; sino que vienen pacientes de El Talita, Balde de Escudero, y ahí estamos hablando de otro departamento. Vienen desde San Martín a atenderse. Entonces lo que más necesitamos es profesionales. En este momento contamos con dos médicos. Dos médicos nombrados en carrera sanitaria y eso es realmente preocupante. Hasta hace poco había más. Perdimos diez profesionales y dentro de ellos tres médicos clínicos, cardiólogo, diabetólogo, traumatólogo, oncólogo. Son especialidades muy importantes y no las tenemos cubiertas en este momento ¿Por qué? Porque en la época de pandemia hubo un momento en que no los dejaban pasar, pero después cuando pasaron ya no les quisieron renovar el contrato y también por mala gestión de algún director de turno. Así fuimos perdiendo a los profesionales.
-Las limitaciones en materia de salud no son una particularidad de Quines, sino que también se repiten en la región…
-Sin dudas. Hay falta de profesionales en todos lados. Me decían los colegas de Candelaria que ahora no tienen traumatólogo, tampoco en Quines. Entonces la mayoría de los turnos son gente de Quines y ya no hay nadie que los atienda. Además, tenemos otra particularidad que es la falta de medicina privada. Porque si tuviéramos consultorios médicos externos con médicos de otras localidades sería un alivio. Pero no tenemos una clínica privada donde uno pueda recurrir a recibir una atención médica así que es complicado, sobre todo porque estamos a 140 kilómetros. Actualmente todo lo que ocurre, ya sea mínimo, es derivado a la ciudad de San Luis. Y en este momento tenemos tres ambulancias para un solo chofer. Entonces se complica todo.
–En Quines el desempleo es otro problema que atraviesa a la gente…
-Me estoy reuniendo con mucha gente en este momento. En barrios de todo el departamento y la gente no nos piden planes. Nos piden trabajo, trabajo genuino. Nos piden ser nombrados como corresponde, hay gente del Plan de Inclusión que todavía está allí hace años, trabajando en malas condiciones. Me parece que no es correcto tener a las mujeres a la vera de la ruta. En su momento el Plan de Inclusión fue importante, pero ya dejó de serlo en cuanto a las condiciones de trabajo. La gente no puede trabajar de esa manera. No pueden trabajar cortando yuyos. Es decir, hay chicas que lo hacen perfectamente, hay hombres que lo hacen perfectamente, pero se pueden hacer otras cosas. El Plan de Inclusión se puede implementar de otra manera. Creo que el 11 de junio llega Claudio Poggi y lo va a implementar de una mejor manera. Él no va a correr a nadie, porque no es su forma, no es su política. Nadie va a perder ni la beca 22 AG, ni el Plan de Inclusión, ni ningún plan. Sí los va a mejorar.
Con la gente también conversamos sobre el déficit habitacional que hay. No hay viviendas en Quines desde la época de Poggi. En esta última gestión se hicieron sólo 27 casas, que para la localidad es nada. Y en ellas la gente te dice que llueve, que si conectaban un celular, no podían tener enchufada la heladera. Están mal hechas. Y ni hablar de la discrecionalidad, del mal manejo que hubo en las viviendas. No se la dan a la gente que realmente la necesita sino al amiguismo.
-¿Podemos decir que la paz, la tranquilidad que nos atravesó en la infancia y la adolescencia, la seguridad se ha perdido en alguna medida?
-Se ha perdido porque Quines no escapa a la realidad de toda la provincia. La falta de trabajo es muy grande en toda la provincia. La falta de chicos en la escuela es muy grave, entonces eso se refleja en una inseguridad atroz. Ahora no se puede dejar la puerta abierta como antes que dormíamos con la puerta sin llave. O las bicicletas sin atar. Una vez vino una amiga de Buenos Aires y me decía cómo podíamos dejar las bicicletas así sin atar a la salida de la escuela. Eso ya no ocurre, hay muchos robos de bicicletas, de garrafas y demás. Han entrado a robar a algunas casas.
-¿Y la droga?
-También se está viendo. Ya llegó a Quines. Esperemos que se pueda combatir.
-¿Y la Policía actúa?
-En la medida de lo posible, actúa. Como pueden, actúan con las pocas armas que le dan. Porque bien sabemos que la policía no está equipada, no trabaja en concordancia con otras localidades y otras provincias. Actúan solas, entonces hay mucho por trabajar en la provincia. Hay mucho por trabajar en Quines y en el departamento Ayacucho.
-Hay algunos departamentos en los que uno ve rasgos de nepotismo. Y Ayacucho no es la excepción. Vemos que en esta elección, la intendenta de Candelaria propone como su sucesor a su hijo, en el caso de Quines, el intendente propone como sucesora a su hija ¿Este fenómeno es algo que llama la atención de la ciudadanía?
-Antes se veía como algo normal. Porque en Candelaria son dos hijos de la intendenta los que están involucrados. Tiene una hija, que es concejal y presidenta del Concejo Deliberante. Ella ahora va como candidata a diputada y el hijo se postula para sucederla como intendente. En Quines el intendente lleva a su hija como candidata y tiene a su hijo como secretario de Gobierno y su primo es secretario de Hacienda. Pero la gente ya se cansó de eso y se está dando cuenta que ellos, las autoridades, en vez de trabajar para el pueblo, pasan a tener un negocio familiar.
Por eso cuando los escucho dicen ‘Voy a hacer tal cosa, voy a hacer tal otra’, me pregunto ¿por qué no hicieron antes lo que prometen si hace ocho años que están gobernando? En el caso de Quines, ocho años. Pero mucho más en Candelaria, donde llevan 30 años.
En Quines la hija del intendente hace dos años que está gobernando ella porque es a la única que vemos. Al intendente no se lo cruza por la calle a no ser que sea un acto donde sí tiene que estar. Entonces la gente a eso lo ve y creo que se reflejará el 11 de junio.
-¿Quines es uno de los pueblos donde un mismo partido político gobernó en los últimos 40 años, cree que hay cierto cansancio en la gente?
-Sí, porque no se han hecho buenas políticas. Creo que el único momento donde se diferenció el gobierno de Quines fue cuando Claudio Poggi fue gobernador. Con él tuvimos muchas visitas, muchas obras para Quines. El hospital fue construido en la época de Poggi. Entonces sí, la gente se cansó. Yo creo que este fenómeno, esta marea apoyará. Cuando uno sale a la calle y le pregunta a la gente quién gana la elección, te responden ‘Gana Poggi’.
Creo que haremos una muy buena elección más allá de los aprietes, de las prebendas, más allá del clientelismo, más allá de todo lo que están prometiendo o presionando a la gente para que los voten.
-La transparencia es una asignatura pendiente en muchos municipios… se piden rendiciones de cuenta a los intendentes y no cumplen. ¿Esto también sucede en el departamento?
-Es así. No sabemos la verdad de lo que pasa en los carnavales, por ejemplo. Me refiero a fiestas importantes donde hay mucho movimiento de dinero. O como la fiesta del pueblo, la Fiesta del Mate. Hace unos días me reuní con unos artesanos de la madera, todos sabemos que es una fiesta nacional y les pregunté por qué no habían participado y me respondieron que no los invitaron. Son cosas extrañas con una falta de transparencia en todo. No rinden cuentas a nadie ni los balances. Además todo se aprueba al tener mayoría en el Concejo Deliberante, hacen lo que quieren.
El departamento Ayacucho es grandísimo, recorro mucho, anduve muchos kilómetros por día. He recorrido la zona de más allá de Candelaria, Quines, Luján, Leandro Alem y San Francisco y aún me queda toda la otra zona, desde Santa Rosa, La Botija, La Cañada, La Tranca. Son zonas muy alejadas, muy remotas, terriblemente inhóspitas. El problema que tienen esas zonas es el agua, que llega con el acueducto, que lo inauguraron con bombos y platillos, pero no es agua de buena calidad. Entre todos los vecinos se reúnen en San Antonio y viene uno y compra agua en San Francisco para tomar. Entonces la situación es preocupante.
En cuanto a San Francisco, es una es una localidad bellísima que la estoy recorriendo mucho. El viernes me reuní con un grupo de vecinos, gente muy humilde, la mayoría de ellos sin trabajo, viviendo de changas y lo que me pidieron es trabajo genuino. No me pidieron un plan, me pidieron trabajo. Ellos empezaron con un merendero, entre las familias, viendo la necesidad que había en el barrio, juntando apoyo de los comercios y les están dando una merienda a los chicos y ahora los días sábados, un almuerzo. Son cosas preocupantes.
El tema del turismo realmente lo piden mucho los sanfrancisqueños porque, si bien tuvo un boom con el dique, no está bien explotado. Tengo un proyecto muy importante que tiene como objetivo desarrollar un corredor turístico con tres departamentos. Ya lo he hablado con el departamento Pringles, con localidades como El Trapiche, La Carolina, que pasará por Ayacucho por San Francisco, El Amago, tenemos a Leandro Alem, Luján, Quines, Candelaria y también pasar por Junín, El Talita y después tenemos Santa Rosa del Conlara, Merlo y Lafinur.
Entonces se podría hacer un corredor espectacular para que la gente, el turismo que nosotros tenemos no sea un turismo de paso. Porque la gente viene a San Francisco y lo que me dicen los cabañeros es que solo vienen dos noches y eso económicamente no ayuda tanto. Les sirve, obvio, pero le serviría más que la gente se quede más tiempo y haga un recorrido.
-¿Qué otra idea tiene para el departamento?
-Lo principal es dedicarme, y lo he hablado mucho con Claudio (Poggi) y él sabe que conozco el tema salud porque soy delegada del gremio APTS y eso me dio la capacidad de recorrer cada uno de los hospitales del departamento como así acompañar a la Comisión Directiva de APTS a otras localidades e interiorizarme de toda la problemática que es muy grande en salud.
Por ejemplo inauguraron también con bombos y platillos un ecógrafo en Quines. Pero tenemos un especialista cada 15 días. No hay un médico especialista nombrado en Quines. Y si hay una urgencia tienen que traer al paciente hasta San Luis capital. Entonces hay que rogar a Dios que el paciente tenga los medios como para irse a otro lado. Es muy problemático lo que pasa. Cuando yo entré, hace nueve años, había ocho médicos en la carrera sanitaria, ahora hay dos.
Video: Víctor Albornoz – Edición: Juan Ledesma – Fotos: Marcos Verdullo