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De la tranquilidad a la mirada al piso: las imágenes que nadie vio de Sebastián Villa el día de su condena

El futbolista colombiano llegó a los Tribunales de Lomas de Zamora escoltado por tres amigos, su abogado y un integrante de la dirigencia de Boca Juniors. Entró a la sala, se mantuvo inmutable durante unos minutos y rompió en llanto al escuchar el fallo. Se fue con la cabeza gacha.

Captura de pantalla video de TN.
Actualizada: 02/06/2023 21:16
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Inmutable y con la frente en alto. Así llegó Sebastián Villa a los Tribunales de Lomas de Zamora para escuchar la sentencia que finalmente lo condenó a dos años y un mes de prisión por haber sido encontrado culpable en la causa por violencia de género contra Daniela Cortes.

El futbolista colombiano ingresó por una puerta ubicada en la parte trasera de los Tribunales que lo comunicaba directamente con la sala en la que se leyó el veredicto condenatorio.

Luego de esperar unos minutos detrás del estrado en el que se sentó la jueza Claudia Dávalos, ingresó a la sala junto a tres amigos, uno de ellos su peluquero conocido como “Yaca Barber”, su abogado y un dirigente de Boca Juniors.

El buzo blanco que tenía puesto le cubría los erguidos hombros con los que entró a la sala grande del Tribunal de Lomas de Zamora. Se sentó en el banquillo de los acusados y no paró de hablar con su abogado hasta que se hizo presente la jueza. A partir de ese momento el silencio lo invadió.

El delantero colombiano mantuvo la tranquilidad durante gran parte de la lectura del fallo, en el que se lo notó muy serio. Estaba tan concentrado en lo que leía el secretario que no se percató del sonido de un teléfono que obligó a que más de uno de sus acompañantes diera vuelta la cabeza para saber qué era lo ocurría. Fueron dos las oportunidades en las que ocurrieron situaciones de ese estilo. En ninguna miró.

Los minutos pasaron, los nervios se apoderaron de Villa y sobre el final de la sentencia rompió en llanto. Las lágrimas recorrieron su cara desde ese momento hasta que la jueza Dávalos bajó del estrado y se fue de la sala.

 

La salida fue muy distinta al ingreso. Ahí sí se lo notó nervioso, compungido y contrariado. La frente en alto con la que había ingresado ya no estaba y sus ojos solo apuntaban al suelo. Se fue a la misma habitación en la que había estado a eso de las 12.30, cuando todavía no sabía qué le deparaba en la causa.

Apenas unos minutos le bastaron para retirarse de los Tribunales. Ya no se fue por la puerta por la que había ingresado, una ubicada en la parte de atrás del predio, sino por una que estaba al costado de la sala en la que fue el juicio.

Villa se retiró en su Audio blanco, acompañado por los dos amigos con los que llegó a la audiencia final, y las cámaras de TN llegaron a filmar el momento en el que se iba. Cinco minutos después se fue Martín Apolo, su abogado, que se mostró sorprendido por la decisión de la jueza Dávalos. (TN)

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