Gustavo Restrepo junto a Lange: “El contexto latinoamericano es parecido, la gente dice ‘para qué votar si es lo mismo’; si no votamos deciden por nosotros”

La candidata a intendenta de Villa Mercedes por el lema Cambia San Luis, Valeria Lange compartió una charla vía streaming con su colega Gustavo Restrepo, donde ahondaron sobre las similitudes de los países latinoamericanos. Fue un ida y vuelta para transmitir las experiencias de un lado y del otro, que duró alrededor de 2 horas.

Restrepo formó parte del equipo de asesores técnicos de Sergio Fajardo (alcalde de Medellín entre 2004 y 2008), quien logró una transformación importante de la ciudad, cuya labor tuvo diferentes reconocimientos nacionales e internacionales.

Lange planteó que es interesante saber que en las ciudades de Latinoamérica se replican los mismos problemas, ya sea de crecimiento desordenado, como así también de escasos y malos servicios públicos.

El colombiano comenzó analizando los procesos conflictivos que atravesó el país desde 1948 con la guerrilla; “lo cual sigue existiendo, porque no se ha terminado así hayamos iniciado un proceso de paz hace casi 8 años”, según aclaró.

“La guerrilla generaba una situación primero de migración a las ciudades principales, entre ellas a Medellín (como segunda más importante del país) que recibió 600 mil habitantes en 20 años. Colombia vivía una crisis. La crisis era el narcotráfico, y eso significa muchas cosas. La gente lo asume como que trae grandes oportunidades, y me he encontrado con gente que cree que Escobar (Pablo) era una especie de Robin Hood, que eso era una fortuna para Medellín, y que el narcotráfico era una versión positiva del tema”, explicó.

“La verdad es que el narcotráfico degrada, enferma sociedades, especialmente a los jóvenes que son los que más riesgo corren; también descuaderna y desordena la política porque la vuelve corrupta”, continuó.

A todo eso le sumó las otras dificultades que completaban un panorama crítico en ese país; la industria “en capa caída”, el ferrocarril cerrado y la falta de trabajo.

A continuación profundizó sobre lo que vino después con las ideas de Fajardo, un docente matemático. “Teníamos que ver qué estaba pasando con los ciudadanos, y había una desconfianza absoluta a una política corrupta, que no había generado transformaciones. Entonces había que reconstruirla. Les pedimos que nos dieran la confianza que las cosas podían cambiar. No les prometimos nada”, aseguró.

“Tuvimos la oportunidad de trabajar en arquitectura, planificación, aportar y aprender de una experiencia nueva, porque no veníamos de la política. Fue una nueva visión, viniendo de una crisis”, consideró.

Opinó que los contextos latinoamericanos tienen “muchísimas similitudes”, y que “los problemas que no fuimos capaces de resolver en pandemia se están volviendo una bola gigante”. Así aportó que “el 45% de población latinoamericana es pobre, y que la población infantil se está llevando la mayor carga”.

“No estamos alejados de que el narcotráfico se vuelva en algo más complejo. Pero es importante no llegar a los índices de violencia que tuvo Medellín. Hay que trabajar para resolver los problemas para evitar que se vuelvan mayores”, analizó respecto a la realidad de la Argentina, y particularmente lo que se vive en Rosario.

“Cuando llegamos, iniciamos la construcción de un proceso con las comunidades, diferente a los gobiernos anteriores que llegan sin programas ni planes, y que por sola intuición saben qué necesita la gente y dónde lo van a poner. Latinoamérica es parecido en eso también”, señaló.

“Había que construir confianza que estaba rota, porque la gente decía ‘para qué votar si es lo mismo’; y nosotros les decimos que cuando no votamos eligen por nosotros. Iniciamos un proceso de ética, una nueva forma de mirar. Planear para no improvisar”, dijo.

Lange y Restrepo, ambos especialistas en urbanismo, coincidieron que desde el Municipio se debe lograr un contacto directo con los vecinos, por medio de las asociaciones barriales, para conocer realmente cuáles son las necesidades y problemática de la población, para así poder gestionar los recursos y proyectar las obras necesarias suplir dichas falencias.

“Esta política de Gobierno inclusiva con la comunidad, es la contrapartida de las obras o megaobras innecesarias e inoportunas que suelen ejecutarse por mero capricho del Gobernante sin atender o conocer la realidad de la comuna que gobierna”, tuvo en cuenta la candidata de Avanzar.

Señaló que Medellín lo logró mediante esa interacción con la comunidad, donde se pudo rediseñar la ciudad de manera tal que revirtieron “la histórica estadística de ser considerada la ciudad más peligrosa del mundo, a lograr una ciudad modelo, segura, amigable con el medio ambiente, y elegida para vivir en ella”.

Subrayó que la transparencia en la gestión, rendición de cuentas, retroalimentación del diálogo fluido con la comunidad “fueron los pilares del éxito”.