“No podemos vivir tranquilos”: los reclamos por más seguridad en los barrios del oeste coparon la sesión del Concejo Deliberante
Los testimonios de vecinos que explican cómo viven en medio de una escalada de robos, se multiplicaron. Hubo pedidos de más presencia policial y hasta la idea de alumnos de crear un “corredor seguro” para asistir a clases.
La primera sesión en los barrios del Concejo Deliberante de 2023 estuvo marcada por una tónica de reclamos por parte de los vecinos de la zona oeste de la ciudad de San Luis, pero uno ganó terreno entre otros: la inseguridad que viven los diferentes vecindarios.
Es que, a través de pedidos particulares presentados y que serán estudiados en las comisiones, las personas expusieron la necesidad de gestionar para atacar el flagelo.
Un grupo de alumnas de la Escuela Autogestionada Nº 3 Madre Teresa de Calcuta fue el primero que expuso sobre la problemática y hasta solicitaron generar un "corredor escolar seguro".
¿De qué se trata la idea? Brindar iluminación, realizar tareas de desmalezado y avanzar en el arreglo de veredas, todas tareas competentes de la Municipalidad capitalina.
Sumado a esto hay otros puntos que señalaron como importantes como la ampliación del beneficio del boleto estudiantil gratuito.
A la voz de las estudiantes se le sumó la de Susana Escudero, una vecina del barrio Sargento Cabral, que hizo hincapié en que se tomen medidas para que les den “algo más de seguridad” como la instalación de una garita oficial.
“No podemos vivir tranquilos, no podemos salir porque no sabemos si, cuando regresamos, vamos a tener nuestras cosas. Necesitamos más custodia policial, lo que sea necesario”, pidió.
A lo largo de la sesión que duró poco más de una hora y media, las voces se fueron incorporando con experiencias propias. Además, de que en cada una de las intervenciones pidieron por una garita policial.
Sandra Jarquis, una vecina del 1ro de Mayo contó cómo sufrió la delincuencia en el último tiempo: “A mí me robaron tres veces, se me suben por los techos. Quiero que pongan seguridad. Llamo a la Policía y se demoran mucho. Por favor, queremos contención”.
Luciana Chuecca, del 5to Centenario se detuvo en cómo la ciclovía se convirtió en una zona “muy insegura” y dijo que la comisaría con injerencia en el sector (la 6ta) queda “muy lejos” de los hogares.
“Muchos vecinos van a trabajar y transitan la ciclovía. También están las parcelas trabajando. Hay chicos que van a la escuela. Me gustaría que se ponga iluminación para más seguridad”, sostuvo.
Lo mismo expresó Esther Miranda. Planteó que los habitantes “sufren la inseguridad” y que por estos días se registran “montones de hechos” vinculados a robos y hurtos.
“Al no tener luz, los delincuentes, cuando ven las camionetas policiales, corren al campo y los efectivos no pueden agarrar a nadie”, agregó.
Así, relató que tienen un grupo de WhatsApp del barrio y que, ante cualquier alerta, llaman a la Policía.
“Queremos que nos escuchen, estamos muy aislados del casco urbano”, completó.
Otras problemáticas que expusieron fueron ligadas a la llegada de agua potable, de electricidad, de asfalto y bacheo, y hasta cloacas.