Femicidio de Cecilia Strzyzowski: cinco días de impunidad y cómo descartaron sus pertenencias
"César Sena quemó una valija y sacó varias bolsas de basura" declaró Gustavo Obregón ante la Justicia. Desde el día de la desaparición de la joven hasta la intervención judicial, el Clan Sena se encargó de limpiar la escena del crimen.
Noticias Argentinas accedió a la declaración de Gustavo Obregón, el único de los siete detenidos que aportó información valiosa sobre lo que hicieron con Cecilia Strzyzowski, la mujer de 28 años que desapareció el 2 de junio y todas las pruebas apuntan a un femicidio brutal.
Los hechos que describió Obregón, ex candidato a diputado provincial por el Frente Chaqueño de Jorge Capitanich, ocurrieron el martes 6 de junio. La joven de 28 años fue vista por última vez ingresando a la casa de los Sena en Santa María de Oro al 1400 el viernes 2 de junio a las 9.15 de la mañana. Entró. Nunca salió.
Obregón relató que condujo el vehículo que trasladó a Cesar Sena por "el barrio". El barrio es el de Emerenciano Sena, en la zona sur de Resistencia y donde los punteros no permitieron que Noticias Argentinas filme ni ingrese a entrevistar a sus vecinos.
"César prendió fuego la valija" explicó Obregón. Fue el 6 de junio pasadas las 20 horas: "César salió de la casa con una valija y una mochila, lo pusimos en el asiento trasero de mi auto. Me dijo "vamos al barrio". Sobre la última calle asfaltada, pasando San Martín, el hijo del matrimonio piquetero, según Obregón, dijo: "Frena ahí". Bajé la mochila y la valija. La prendió fuego con un encendedor al lado del cordón. Luego fueron rumbo al Campo Rossi, la famosa chanchería, y César, según Obregón, desechó el contenido de dos bolsas de plástico en la vera del río. Luego prendió fuego la bolsa de basura. ¿Se trataban de las cenizas de la joven asesinada 4 días atrás?
Crimen, desaparición e impunidad: cinco días de zona liberada para limpiar pruebas
Emerenciano Sena y Marcela Acuña: dos personajes clave para saber cómo mataron y qué hicieron con el cuerpo de Cecilia Strzyzowski.
Por esas horas, Marcela Acuña desafiaba a la prensa local y sugería que Cecilia aparecería luego de las elecciones. Se movían con impunidad en Resistencia. La policía no los había allanado. La justicia todavía no los investigaba. Habían descartado nueve teléfonos celulares. Movían muebles de la casa de Oro al Barrio Sena como un colchón, la cama y su respaldo, posiblemente, donde se recostó la joven asesinada. Limpiaban la escena del crimen con colaboración de referentes que aún siguen en libertad.
¿Todo el siniestro manejo de limpiar la escena del crimen y pulverizar el cuerpo de Cecilia lo hicieron solos? O contaron con asesoramiento en el gobierno provincial? Es la pregunta más inquietante que, a 22 días, muchos se preguntan si tendrá respuesta.