Pobreza, desprotección y plata que “no alcanza ni una semana”: el duro diagnóstico de un cura sobre la realidad de San Luis

El delicado panorama social y económico del país y de San Luis fue abordado por el párroco Alberto Olivera que por estos días cumple sus tareas como cura en la capilla "Inmaculado Corazón de María".

Debido a su compromiso en los barrios del oeste de la capital junto a colaboradores independientes (la iglesia está ubicada en el Barrio San Martín) es palabra autorizada para abordar la realidad de los vecindarios más vulnerables de la capital.

En una entrevista con el programa Solo un Café de Radio Universidad de Oscar Flores, contó cómo la pobreza caló hondo en las estructuras familiares y ahora llega a los cuatro puntos cardinales.

“Hoy se ve con mucha fuerza (la pobreza) en el (barrio) República. Tenemos más de 300 manzanas ahí y lo que observo, todos los miércoles voy, es mucha, mucha pobreza, muchos niños con desnutrición, muy desprotegidos”, precisó.

Si bien la parroquia contiene más de 80 familias con alimentos y ayudas, la presencia de la iglesia comprende a barrios como el 1° de Mayo, el República, el 9 de Julio, entre otros.

Así, hizo hincapié que, si bien ahora está llegando obras como el asfalto, a la gente “no le llega la comida ni el laburo”.

“A muchos de los que nos están escuchando les cuesta llegar a fin de mes, pero acá hay gente que no llega ni a la semana. La gente no come. ¿Carne? Muy poco. Nada, absolutamente nada. ¿Huevo? nada tampoco”, indicó.

En este sentido contó que el centro pastoral recibió por unos meses una ayuda de alimentos secos proveniente del Gobierno provincial en el 2022, pero luego fue cortada.

“Es evidente por qué quitaron la ayuda. Nosotros no somos un centro político. Entonces, al político no le interesa trabajar con gente que va a entregar las cosas a gente que lo necesita. Sin interés de nada”, agregó.

Otro de los puntos que trajo alusión son las adicciones en los más jóvenes: “La droga está en todos lados y más en estos lugares. Existe la prostitución, el hacinamiento, etc. Todo lo que trae a la pobreza. Yo creo que podemos hacer algo”, dijo.

Además, Olivera mantuvo un encuentro con el rector de la UNSL, Víctor Moriñigo para celebrar el mes de las infancias y el Día de San Luis en el barrio 9 de Julio el 26 de agosto.

Actualmente se inició una colecta de ropa y juguetes para entregar ese día y compartir un almuerzo elaborado por el Comedor Universitario.

“La preocupación de todos los que trabajamos desde una institución, es la problemática social, la paz social concretamente. El hambre está, la necesidad de la gente está. Creo que el acercamiento de la universidad a los barrios es muy importante”, explicó.

Y finalizó: “Hay una realidad que nos azota fuertemente, y que no se ha solucionado. Los merenderos no se solucionaron, muchos se cerraron, no se dio prioridad”.