San Luis luego de la devaluación: cada vez hay menos demanda del dólar por la incapacidad de ahorrar

La devaluación del 22% que llevó adelante el Gobierno nacional luego de los resultados de las elecciones primarias, prontamente cumplirá dos semanas y los cimbronazos dentro de la economía continúan a la orden del día.

Si bien el dólar oficial llegó a $349,95, la brecha con la divisa informal alcanzó valores históricos. El llamado dólar “blue” llegó a rozar los $800.

Pero ¿qué significan estos números? ¿cuál es la realidad del panorama puntano? Para ello El Chorrillero dialogó con Héctor Omar Montoya, el gerente de la compañía financiera Montemar.

Uno de los principales conceptos en los que se detuvo es que la demanda de dólares cayó por la propia crisis de ingresos que se registra tanto en San Luis como en todo el territorio argentino, además de las múltiples restricciones determinadas por el Banco Central.

“Parte de la caída de ventas se genera porque los salarios no subieron. La Argentina tiene un gran problema: no es el valor en sí del dólar sino el deterioro diario y abrupto de los ingresos de capacidad de ahorro”, sostuvo.

Uno de los factores determinantes para acceder a la compra de los USD 200 mensuales (como máximo) es que los salarios del ahorrista sean proporcionales al pedido. En otras palabras, a menos ingresos y suba del dólar oficial, menos posibilidad de acceso.

No todos están habilitados para acceder a esa divisa conocida como “dólar ahorro” o “dólar solidario”. De hecho, en los últimos meses el Gobierno endureció aún más el cupo para poder comprar a través del banco hasta dos billetes con el retrato de Benjamin Franklin. Además, en julio pasado aumentó la presión impositiva sobre este tipo de cambio al subir el recargo de la percepción a cuenta de Ganancias al 45%.

En la actualidad, existen 15 restricciones que impiden a los ahorristas acceder a esta variante del dólar. Cada vez menos argentinos pueden obtener este tipo de cambio, por los reiterados endurecimientos del cepo.

Montemar, ubicada en el corazón del centro puntano, tiene dentro de sus servicios la compra y venta de dólares del sector minorista y tiene un recargo mínimo por el traslado, impuesto por el Banco Central. Hoy se vende a $368.

El organismo conducido Miguel Pesce preveía una enorme presión en los distintos mercados de cambio ante la sorpresa por la victoria de Javier Milei y prefirió no seguir sacrificando reservas. Estimaciones privadas calculaban que llegó a las PASO con un nivel de reservas netas -tenencias menos deudas- negativo en USD 10.000 millones. El margen para seguir vendiendo era muy pequeño.

Así, Montoya conceptualizó sobre la coyuntura económica nacional: “¿Si esta crisis se vivió? Si, la diferencia es que es más prolongada que las anteriores. Estamos en un momento de terapia intermedia muy cerca de la intensiva. Si no hay un cambio de rumbo urgente, esto va a seguir creciendo. Hoy quienes tienen la conducción económica del país están llevando a cabo medidas de salvatajes que no condice con lo que la realidad necesita”.

“Tenemos muestras diarias de debilidades tal como las restricciones a las exportaciones, todo en un país que se requieren divisas. Es complejo de entender tanto desde acá como desde el punto de vista de los inversores”, agregó.

Lo cierto es que la incertidumbre de los comercios, la desesperación por remarcar precios y la cadena de pago financiera casi desecha, componen un combo explosivo para el sistema productivo o por lo menos así lo considera Montoya.

“No hay costos terminados y lo que es más grave, ya hay faltante de disponibilidad de productos en los distintos rubros. Se hace imposible planificar para un empresario su día a día”, precisó.

Y completó: “La principal variable que logra controlar la inflación se llama equilibrio fiscal y gasto público. En Argentina fue creciendo año tras año el déficit fiscal, por consiguiente se llegó a una emisión monetaria cada vez más inflacionaria”.

Lo cierto es que en medio de una prolongada crisis económica con inflación de tres dígitos y déficit fiscal, el BCRA congeló el tipo de cambio oficial a 350 pesos por dólar hasta las elecciones presidenciales de octubre y subió su tasa de referencia al 118% nominal anual.