Crimen de Pérez Algaba: inspeccionaron una casa demolida y hallaron elementos que serían claves
La fsicalía también citó a declarar a Charlotte Caniggia como testigo.
En el marco de la investigación por el asesinato del empresario Fernando Pérez Algaba se realizó este viernes un allanamiento en una casa demolida en la localidad bonaerense de General Rodríguez, donde se secuestraron distintos elementos que serían de suma utilidad para esclarecer el hecho.
Del operativo, realizado en el barrio privado "Renacer", partició la DDI de Lomas de Zamora y la Policía Científica, cuyos agentes secuestraron una sierra de amoladora, un clavo con manchas hemáticas y tres guantes de nitrilo.
Es posible que algunos o todos esos elementos se hayan utilizado para asesinar y desmembrar al empresario, cuyos restos fueron hallados en una valija en la localidad de Ingeniero Budge hace poco más de un mes. Todos esos objetos serán analizados en los próximos días y a partir de los resultados se podrá establecer si la sangre hallada corresponde a Pérez Algaba.
Fuentes judiciales le confirmaron a Noticias Argentinas que las fuerzas de seguridad hicieron las pericias en la zona donde Nahuel Vargas, uno de los principales detenidos por el crimen, declaró que había una vivienda y que fue reducida a escombros horas después del asesinato.
Por otra parte, el fiscal Marcelo Domínguez convocó a declarar a Charlortte Caniggia, hija del ex futbolista Claudio Caniggia, por su presunto vínculo con algunos partícipes del asesinato de Pérez Algaba.
Uno de los detenidos, el comisario Horacio Córdoba, señaló que en una oportunidad se reunió con el empresario, quien le comentó que la oficina donde estaban -ubicada en el barrio de Puerto Madero-, se la había prestado la mujer.
En consecuencia, Charlotte Caniggia deberá presentarse como testigo el próximo lunes en Sub Dirección Departamental de Investigaciones (SubDDI) de Esteban Echeverría, en el sur del conurbano.
Con respecto a los siete detenidos que tiene la causa, se confirmó que el pasado 23 de agosto fueron trasladados al penal de Melchor Romero, la misma cárcel donde están los rugbiers condenados por el crimen de Fernando Báez Sosa.
Así lo dispuso Sebastián Monelos, juez de Garantías de Lomas de Zamora, quien rechazó liberarlos y anunció que serían alojados en distintos módulos y pabellones del penal para resguardar su seguridad.
A tres de ellos los imputaron por ser coautores del delito de "homicidio triplemente agravado por ser cometido con alevosía, por codicia y por ser cometido por el concurso premeditado de varias personas, ello con el uso de arma de fuego en concurso real con falso testimonio".
Mientras que a Maximiliano Pilepich, Nahuel Vargas, Luis Contreras y Flavia Lorena Bomrad se les añadió el delito de "falso testimonio".
La semana pasada la Justicia decidió liberar a Alma Nicol Chamorro, la mujer trans que había sido señalada como la supuesta dueña de la valija donde aparecieron los restos desmembrados de Pérez Algaba.
Luego de distintas declaraciones donde la desligan del crimen, la fiscalía a cargo de Marcelo Domínguez consideró que no había elementos suficientes para imputarla y solicitó la "inmediata libertad" de la mujer al juez de Garantías de Lomas de Zamora. (NA)