La Federación Española dijo que Jennifer Hermoso "miente"
La entidad emitió este sábado un nuevo comunicado en el que vuelve a atacar a la jugadora de la selección española Jennifer Hermoso, a quien acusa de “tergiversar la realidad” por sostener que en el beso que le dio Luis Rubiales tras la final del Mundial no hubo consentimiento cuando “el pico fue consentido”.
El escrito se dirige expresamente contra la jugadora con el propósito de insistir en que “mentía en las declaraciones” formuladas a través del Sindicato FutPro y también "en todas las afirmaciones” del comunicado personal que difundió este viernes.
La RFEF sugiere que Hermoso publicó un comunicado “claramente preparado por terceros” con el fin de “disponer de los elementos necesarios para la suspensión de las funciones del presidente de la Federación” y asegura que podrá “acreditar en el momento oportuno” que no ha dicho la verdad.
Que disponemos de todos los informes pertinentes y peritajes que acreditan lo afirmado por el presidente y que vamos a ejercer las correspondientes acciones legales contra todas aquellas personas que están falseando la realidad y cometiendo delitos muy graves”, advierte.
La RFEF califica de “extraordinariamente incomprensible” que Hermoso hablara de “una mera anécdota sin trascendencia” en sus declaraciones ante el welfare officer de la FIFA tras la final del Mundial e incluso apuntara a la prensa que "ha sido el momento, la efusión y del momento, que no hay nada más allá, y que se va a quedar en una anécdota".
Censura que en las últimas horas haya manifestado por escrito que el beso fue un “abuso en el que no medio consentimiento” y que se sintió “vulnerable y víctima de una agresión, un acto impulsivo y machista fuera de lugar y sin ningún consentimiento por mi parte”.
La Federación dice que la jugadora incurre en graves contradicciones
La Federación denuncia "las graves contradicciones en el relato inicial de lo acaecido y las graves acusaciones vertidas por Hermoso desde que ha sido abducida por el Sindicato FutPro", hasta el punto de preguntar "a qué intereses responde el sorprendente cambio en la versión inicial y calificación de los hechos".
Sin aportar nuevos datos ni pruebas, la Federación sentencia que "los hechos son los que son y, por muchos comunicados que se quieran sacar para tergiversar la realidad, es imposible cambiar lo que ocurrió". "El pico fue consentido. El consentimiento se presta en el momento con los condicionantes del momento. Después se puede pensar que uno se ha equivocado, pero no puede modificar la realidad", concluye el texto de la Federación.