Triste panorama para las ventas por el Día de la Madre: “El peor año de mi vida”
Por la crisis económica, los comerciantes de la ciudad sostienen que hay “pocas expectativas” para este fin de semana. Viven con "incertidumbre y angustia" porque deben cambiar todos los días los precios.
Por Sonia Schoenaker
Este domingo se celebra el Día de la Madre y los comerciantes prepararon sus vidrieras con ofertas y promociones, porque del año, es uno de los días más esperados para vender. Sin embargo, la crisis económica muestra al interior de los locales un triste panorama.
Los negociantes aseguraron a El Chorrillero que las ventas “son bajas” en comparación a otros años, y tienen “pocas expectativas” en los días previos al festejo de mamá. “Las esperanzas” desaparecieron con el paso de los días.
“Parecía que iba a mejorar, pero no. La gente busca lo más barato, da vueltas, pregunta precios y no vuelve”, comentó Gladys Olivero, desde su local de ropa Génesis, ubicado en Salta y Lavalle.
Según transmitió, hasta el momento las ventas son casi nulas: “De ropa ahora se vende más o menos un 20% de lo que se solía ser antes”.
Manifestó que las personas optan por comprar regalos más pequeños como perfume para telas, velas y sahumerios. “Como máximo gastan $2500”, dijo.
Gladys tiene 25 años como comerciante, y aseguró que este 2023 el golpe al bolsillo se sintió como nunca: “Hace mucho tiempo que tengo negocio. Estuve 18 años en la calle Pescadores, hace 7 que estoy acá y este fue el peor año de mi vida”.
“Como comerciantes la amargura es terrible, antes venía contenta a trabajar, ahora ya se ha hecho como un estrés porque los precios cambian todas las semanas”, expuso.
Otro caso similar es el de Marianela Lucero de Adocre, una regalería también ubicada sobre calle Salta. La joven señaló que, hasta ahora, todo se mueve “tranquilo”.
“Las expectativas son bastante bajas. En la semana no ha pasado nada y estamos haciendo promociones para ver si llegamos a tener algo de ventas”, afirmó.
Los vendedores coinciden en que quienes están dentro de los locales, antes de comprar procuran averiguar precios en otros lados: “La gente entra, pregunta y dice después vengo, pero no vuelven más, está todo caro”.
A pesar de los intentos de poner promociones y abaratar los costos de la mercadería, un desayuno completo cuesta $9000, y una opción más básica $7000. En el caso de que el cliente elija comprar solo la taza puede gastar desde $4000 a $7000.
“Por lo general la gente cuando cobra viene al centro a pagar cuentas y comprar la comida. Se trabaja para comer”, concluyó Lucero.
En los locales de la peatonal la realidad es similar, en el caso de Armando Sport, ubicado en la esquina de Pedernera y Edison, la gente ingresa para averiguar precios, y sigue su camino intentando encontrar un regalo que esté dentro del presupuesto familiar. Cristina Bernabeu aseguró que tanto su local como el resto de comercios de la cuadra “hay poco movimiento” y añadió que “año a año cada vez es menos y la plata no alcanza”.
Un par de zapatillas puede costar desde $15 mil, las más básicas, hasta $70 mil, aunque hay modelos de primeras marcas mucho más caras que eso.
Además, comentó que este miércoles tuvieron que aplicar un aumento del 20% en gran parte de la mercadería: “Unas Crocs que ayer salían $18 mil, hoy salen $20 mil. Si te demorás un poquito, perdiste”.
Griselda Quilina de la regalería Loretta, ubicada en Fuerte Constitucional 17, aseguró que en años anteriores, la gente reservaba desayunos con 15 días de anterioridad. “Hasta hoy jueves está tranquilo, se han vendido algunas cosas. Respecto a otros años está bastante para atrás”.
En este local, las cajas con un desayuno sorpresa cuestan desde $5200 a $8900.
“Este día de la madre va a ser más difícil de lo que fueron los años anteriores”, afirmó Sandra Cano, empleada de Crazy Cell, un negocio de tecnología ubicado sobre Lavalle.
Transmitió que están preparados para vender este fin de semana, “pero con la incertidumbre de que el dólar aumenta y que todo está aumentando”. Señaló que la situación angustia porque “todo el tiempo” están cambiando precios: “Eso te desanima”.
Vanesa es empleada de la tienda de ropa Vepa Moda, ubicada sobre Edison, entre Avenida Mitre y Pedernera, indicó que este año se vive “muy distinto”.
“Ahora hay mucha tarjeta, pero antes de pasarla la gente lo piensa”, dijo.
Un pantalón de jean puede costar desde $12.500 hasta $19 mil, las remeras varían desde $4800 a $8500, dependiendo de la calidad y la marca, y un pantalón de fibrana se consigue arriba de los $4000.