Vecinos del barrio Remedios de Escalada cortaron la calle para reclamar por seguridad

Por Sonia Schoenaker

Este lunes a las 17, los vecinos del barrio Remedios de Escalada se concentraron en la intersección de la avenida Los Álamos y Doctor Domínguez para exigir más seguridad. Allí quemaron neumáticos y llevaron carteles para pedir la presencia de autoridades.

“Nosotros como comisión no teníamos pensado llegar a estos extremos, pero lamentablemente tenemos que apoyar el reclamo porque es nuestro barrio, son nuestros vecinos y a cada instante están robándoles”, manifestó Fabiana Gatica, presidenta de la comisión barrial en diálogo con El Chorrillero.

Señaló que necesitan “presencia de las autoridades”, e invitó a los funcionarios del ministerio de Seguridad que visiten la zona: “Si quieren acercarse al barrio, que se acerquen. Hacemos una reunión, lo charlamos, pero esto tiene que cesar”.

Aseguró que en reiteradas ocasiones elevaron petitorios, pero las respuestas “nunca llegaron”.

“A esas personas que roban tendrían que meterlos presos y no sacarlos, es la única solución que vamos a tener. No solo para este barrio, sino para toda la ciudad, porque sucede en todos lados”, añadió.

Mariela Quiroga, contó por su parte, que la semana pasada entraron a robar tres veces en su vivienda. “Después de eso me llamaron a las 3 de la tarde para avisarme que tenía una persona debajo de mi camioneta queriendo sacarme la rueda de auxilio, estamos cansados”, señaló.

Hace un tiempo que los vecinos se comunican a través de un grupo de WhatsApp para advertirse todos los movimientos e informarse sobre los robos. “Cualquier cosa nos escribimos por ahí. Estamos cuidándonos entre nosotros y no tiene que ser así”, dijo.

Otra de las problemáticas que plantean es la falta de luminarias y sitios abandonados: “Estamos preocupados porque está todo oscuro y los baldíos están totalmente descuidados, entonces hay mugre y pasto alto”.

“Queremos más patrulleros, más seguridad, que vean y recorran este lugar, estamos cansados, por eso estamos acá todos unidos. La unión hace la fuerza y es la manera de que nos escuchen”, expuso Candelaria Giménez.

Según transmitieron, los ruidos de corridas, peleas y tiros los mantienen en alerta todas las noches y “nadie puede descansar”.

“Es muy difícil vivir de esta manera, hay mucha bronca y más de uno quiere hacer justicia por mano propia”, explicó Marcelo Sosa y dijo: “Que alguien nos dé bolilla, ya sea desde el ministerio de Seguridad a nivel provincial, el fiscal de turno, o que se llegue el comisario de la jurisdicción”.

Los vecinos autoconvocados están dispuestos a seguir con la medida hasta que “alguien de la Justicia o del alto mando de seguridad de Villa Mercedes interceda y nos ayude”.

“Lo lamentamos por la ciudad, por el transeúnte, por la línea de colectivos, les pedimos mil disculpas, pero consideramos que es la única opción que nos den bolilla”, concluyó.