Con pocas reservas y muchas consultas, el sector hotelero está expectante por las medidas del Gobierno de Milei
Atribuyen el bajo nivel de contratación de las plazas a la incertidumbre por las decisiones que tomará el nuevo presidente. Estiman que por la inflación, los argentinos optarán por el turismo interno.
Muchos sanluiseños organizan sus esperadas vacaciones con anticipación, pero el panorama dio un cambio rotundo por el crítico escenario inflacionario instalado en el país y ante las expectativas de las medidas que tomará el nuevo presidente, Javier Milei. Las consultas sobran en los principales centros turísticos, pero todavía no se traduce en reservas, que aún están en niveles muy bajos.
Uno de los grandes dilemas que atraviesa el sector son las tarifas, por lo que cada prestador está tomando diferentes medidas. Algunos determinaron no hacer ningún tipo de reserva, otros tradujeron sus precios a dólares. También están los que mantienen todo pesificado, y toman la reserva, pero el precio final lo definen al momento de ingresar al alojamiento.
La coincidencia plena entre los prestadores turísticos de San Luis es que recién después del 10 de diciembre habrá un panorama más acertado sobre el movimiento veraniego. Hasta esa fecha, todo queda en el ámbito de la conjetura.
“Estamos atravesando por un escenario de total incertidumbre, la gente está esperando a ver qué sucede y nos afecta de lleno al sector turístico porque desconocemos si el dólar se va a disparar o no, cuáles son las medidas que se tomarán y cómo esto impactará en la economía de los argentinos”, expuso la integrante de la Federación Empresarial Hotelera Gastronómica de la República Argentina (Fehgra), Silvina Ripke.
En declaraciones a El Chorrillero confirmó que los prestadores de la Villa de Merlo reciben muchas consultas, pero no llegan a concretar la venta: “En enero de 2023, fue bastante atípico la gente empezó a salir recién a partir del 15 de enero y ahora no sabemos qué nos deparará, pero hasta el momento la situación es crítica”.
“Estamos a las expectativas porque también creemos que el valor del dólar tan elevado va a provocar que las personas no viajen al exterior y se inclinen a visitar las provincias argentinas”, dijo.
Explicó que “al menos en Merlo las pocas reservas que hay, se les solicita una seña y al momento de ingresar se les actualizarán los valores. Hay cabañeros que por ejemplo directamente pusieron los valores en dólares”.
“Siempre los cambios traen una merma, pero cuando se arranca nuevamente, se empieza a activar, porque la gente ya sabe cómo moverse. O sea, la incertidumbre es la que pone el punto de freno, y una vez que pasa esto, el consumidor puede decidir cuántos días puede vacacionar”, señaló.
Por su parte, la presidenta de Asociación Empresarial Hotelera Gastronómica y Afines (Aega), Gabriel García dio a conocer que en el caso de la ciudad de San Luis “muchos hospedajes no están tomando reservas, otros no tienen listas de precios y otros tantos directamente lo han dolarizado”.
“Hemos notado que tenemos mayor cantidad de consultas con anterioridad, inclusive desde octubre. Por ejemplo, el último verano que pasó las consultas iniciaron en enero. Otras de las situaciones que se están dando es que quizás antes las personas pedían estadías por 15 días y ahora se reduce a una semana o dos días”, reveló.
Consideró que “va a ser una gran temporada" porque "las condiciones económicas para salir al exterior son muy malas, cuesta mucho y eso va a favorecer el turismo interno, no solo en San Luis, sino en todas las provincias”.
En la misma línea, el presidente de la Asociación Unión de Alojamientos en Red (Udaer), José Ángel Chariano, coincidió en que “hay muchas consultas, pocas reservas y mucho temor de ambas partes”.
“Los turistas llaman para preguntar por los precios, por si se van a congelar. En muchos casos los establecimientos no quieren pasar los valores porque desconocen lo que puede suceder, pero estamos esperanzados que en la segunda quincena de diciembre podamos tener reservas y un panorama más claro”, dijo en diálogo con este medio.
Tuvo en cuenta que en el caso de Potrero de los Funes la mayoría de los cabañeros son pequeñas pymes por lo que se les dificulta tomar reservas anticipadas: “Cuando tenés un cliente que te quiere pagar por adelantado para quedarse tranquilo de que vos no le vas a cambiar el precio, nos sucede que al ser monotributistas si las tomamos y son muchas, nos suben la categoría porque de cierta manera se nos disparan las ventas de manera ficticia y el mes que tenemos el alojamiento completo, no facturamos nada”.
Informó que desde su punto de vista “van a haber reservas, pero va a ser todo sobre la marcha”.
En el caso Villa Mercedes, la situación es similar, pero hay que tener en cuenta que es una ciudad de paso, ya que no cuenta grandes atractivos para los turistas.
“En nuestro caso nosotros trabajamos con las reservas en el día a día. Por el momento solo te puedo decir que las reservas son nulas y esperamos que este verano el turista elija a Mercedes para descansar”, expuso.