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Denuncian que Sergio Moreira y Diamela Freixes no quieren pagarle a un comerciante $40 millones en materiales y que ahora lo amenazan con la Policía

El presidente provisional del Senado y su sobrina, la intendenta comisionada de Nueva Galia acumularon la deuda cuando regalaban órdenes de compra por materiales de construcción.

Sergio Moreira y Diamela Freixes acumularon una deuda millonaria con un comercio de Nueva Galia.
Actualizada: 20/12/2023 13:45
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A pesar de las amenazas que recibe Facundo y su abuelo, los responsables de un emprendimiento familiar en Nueva Galia, se animaron a denunciar cómo la intendenta, hija del condenado ex ministro, Sergio Freixes, los estafó.

En plena campaña electoral Sergio “Pitín” Moreira y su sobrina Diamela Freixes asumieron el compromiso con el corralón “El Gringo” para “sacar fiado” mercadería. Ella se postulaba a la intendencia y él a una banca en el Senado provincial por Dupuy. Empezaron a “regalar” materiales de construcción para asegurarse el voto.

“Hicieron su campaña política usando mi corralón”, aseguró en una entrevista con Mediador en Red, donde relató: “Venía la gente con órdenes de compra de $500 mil por persona. Los comprobantes los tengo todos guardados en una carpeta. Así se fue acumulando una deuda de $40 millones, que para nosotros es muchísima plata. Ahora no quieren reconocer lo que deben”.

También aseguró que le ingresaron “unos cheques de $2 millones y $1.500.000 y fueron rechazados porque están sin fondos”. Ante esto y para cumplir con las deudas es que los está cubriendo con su dinero.

“Nos vienen amenazando que si hacíamos esto (contarlo ante los medios) nos iban a meter presos, y ya nos llamaron de la Policía. Pero me animo porque la gente tiene que saber cómo se manejan ellos. Nos han perjudicado mucho”, señaló.

“Ahora la intendenta no me contesta los llamados, me pone en visto los mensajes. Desestima la deuda, cuando hay un documento firmado donde sí reconoce lo que debe”, señaló.

Sostuvo que “nunca” tuvieron tan vacío el galpón como ahora, y que están por pedir un préstamo para poder acomodarse nuevamente con material.

“Ya estuvimos en Córdoba y vamos a hacer una denuncia en conjunto con los proveedores al Gobierno por los cheques que están sin fondo, porque necesitamos recuperar algo”, anticipó.

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