VILLA MERCEDES
La familia de Juan Ochoa, el hombre apuñalado en el corazón, se quedó con “miles de preguntas sin respuesta”
El hombre era el dueño de una propiedad de alquileres y fue apuñalado después que le pidiera a su agresor que retirara una bicicleta que obstruía el paso.
Este miércoles Juan José Ochoa pudo ser sepultado en el cementerio municipal del pueblo cordobés donde nació: Coronel Moldes. Encontró la muerte de una manera incomprensible el lunes 15 de enero en Villa Mercedes. “Se arruinó toda una familia”, contó a El Chorrillero Noelia, una de las sobrinas.
La víctima había llegado a la ciudad hace 17 años, con un tío que ya falleció, en búsqueda de nuevas oportunidades, de trabajo. Con el tiempo compró una propiedad en General Paz 2119, donde construyó algunos departamentos. Ahora allí alquilan 6 familias. Vivía de eso y de algunas changas. Los propios inquilinos contaron que “se la rebuscaba” y que había puesto “un kiosquito” donde vendía algo de mercadería. Acá no tenía a nadie solo compartía charlas con los inquilinos, y con todos tenía un buen trato.
A Moldes viajaba seguido. La última vez fue para pasar la Navidad, el 21 de diciembre, y hace más o menos una semana había recibido la visita de sus padres Blanca (70 años) y José (80). La noticia del fallecimiento los sacudió: “Fue desesperante no podían creer, no podíamos ninguno caer en la situación”.
“Es un momento bastante duro. Somos de un pueblo tranquilo, donde si han pasado cosas, nunca con este tipo de violencia y de crímenes”, relató la joven. Todo es muy reciente, pero están expectantes en el trabajo de la Justicia, y todavía hay muchas cuestiones por resolver.
Para hacer los trámites de la muerte vinieron el padre y los dos hermanos de Ochoa, Silvia y Jorge. Noelia, hija de Silvia, también los acompañó. Y el martes a las 14:30 se llevaron el cuerpo para darle sepultura.
“Estamos con miles de preguntas sin respuesta, y todo lo estamos viendo por las redes sociales. Aguardando que nos llamen, y que se haga justicia porque esto les arruinó la vida a todos”, sostuvo.
Santiago Gil fue imputado este miércoles por homicidio simple, y le otorgaron la prórroga de detención por 8 días que pidieron sus abogados. El domingo 14 fue hasta los departamentos a reunirse con uno de los inquilinos de Ochoa. Según el fiscal que investiga la causa, “ahí estuvieron varias horas tomando vino”. Al día siguiente la víctima le pidió que sacara la bicicleta que dificultaba el paso en el único pasillo por donde se ingresa. Pero se enojó e intentó agredirlo por primera vez.
Después de eso se durmió cerca de una hora y decidió irse a su casa. Sin embargo cuando encontró a Ochoa en la vereda lo apuñaló en el corazón. El puntazo fue certero y mortal. No encontraron el arma homicida por el momento.