VILLA MERCEDES
La Policía hizo 22 allanamientos en locales que funcionaban como “reducidores” de celulares robados y secuestró 500 dispositivos
La investigación agrupó 18 denuncias que van desde los primeros días de enero hasta el 17 de marzo, y que se hicieron en cuatro comisarías de la ciudad.
Esta mañana la fiscal Daniela Torres encabezó una conferencia de prensa donde se dieron detalles de los 22 allanamientos que se realizaron el martes desde las 7 de la mañana. Confirmaron que es la primera vez que en la provincia se concreta un operativo de estas características relacionado a recuperar celulares robados. Los procedimientos se desarrollaron con el recaudo legal del juez Alfredo Cuello.
Las averiguaciones las llevó adelante el Departamento de Investigaciones de Villa Mercedes, a cargo del comisario Germán Gómez; con la coordinación de la Dirección General de Investigaciones de la Policía, que dirige el comisario Adrián Ramallo. Participaron 50 efectivos de los seis DDI provinciales, prestó colaboración personal de judiciales de la Unidad Regional II, que tiene a cargo el comisario Juan Salinas, y también de delitos informáticos.
En concreto se trata de 18 denuncias por robo y hurtos de teléfonos celulares que los damnificados hicieron entre el 5 de enero y el 17 de marzo en las comisarías 8º, 9º, 10º y 12º.
Por el momento no hay detenidos, pero sí indicios para sospechar que los comercios y casas particulares que fueron registrados por los efectivos serían “reducidores” de dispositivos robados. Torres sostuvo que por lo menos en tres causas los teléfonos fueron entregados en alguno de los locales por $3500, posiblemente por jóvenes con problemas de adicción.
“Lo que nos propusimos es perseguir no solo a la persona que comete el delito, sino a los que reducen, porque no hubiera compradores el delito no existiría. Sepan que los vamos a investigar como a las personas que delinquen, con mucha dureza buscando una sanción para ellos. Si compramos cosas baratas, es que son de dudosa procedencia y posiblemente de delitos”, sostuvo Gómez.
Se pudo comprobar que “reducen los aparatos, los blanquean y lo devuelven al mercado como segunda mano”.
Entre lo incautado hay 169 celulares, tablets, notebooks, computadoras de escritorios y demás dispositivos que se empleaban para el chipiado y desbloqueo de los aparatos. También dinero unos $400 mil en efectivo.
Torres aseguró que ahora viene el proceso de análisis de lo incautado. “Lo primero que queremos hacer es devolverles el celular a los damnificados, y después ver las conexiones”, agregó. También reconoció la labor y el empeño que desarrolló el personal policial.
La Justicia ya tenía sospechas sobre el modo de operar en algunos locales, porque Torres intervino en un hecho anterior donde se logró recuperar celulares y ya hay una persona imputada por eso.