El proveedor aseguró que no entregó comida en mal estado: “Quedamos en el medio de una mala relación entre el director y la cooperadora”

Matías Lima, de la empresa Lima Food que es la proveedora de la Escuela Nº 2 “Nicolás Antonio de San Luis” (ex Bellas Artes) aseguró que no repartieron comida en mal estado a los alumnos del establecimiento.

“Me toca a nivel personal este tipo de acciones, pero en realidad es quedar en el medio de, quizás, una mala relación que existe entre el director de la institución y la cooperadora escolar”, sostuvo.

Ayer se conocieron imágenes a través de las redes que muestran una larva encontrada en un puré de zapallo que fue entregado a uno de los chicos.

El director de la ex-Bellas Artes, Carlos Urteaga dio a conocer la situación. En declaraciones a Radio Lafinur, señaló que hizo un informe al programa Comedores Escolares del ministerio de Educación y, además, se labró un acta.

“Comenzamos a recibir la comida el miércoles y el viernes cerca de las 14 nos encontramos con la situación de que se había entregado milanesa con puré de zapallo, donde había un gusano”, dijo a la emisora el hermano de la ex secretaría de la Mujer, Diversidad e Igualdad, Mariana Urteaga durante el Gobierno de Alberto Rodríguez Saá.

Lima contó que las viandas que entregan “son frescas”, que se distribuyen a buena temperatura y que llegan en “buen estado organoléptico”. Y en este sentido, aclaró que tienen una buena relación con la cooperativa: “Nos ha dado una mano y es la que está empujando por el bienestar de los chicos. Está todos los días presente en el servicio de alimentación”.

“Llevamos conservadoras térmicas desde donde elaboramos los platos hasta la escuela, donde arriban a 75-80 grados más o menos, siempre hablando de alimentos calientes”, subrayó.

Así, detalló que la empresa fue contratada por la cooperativa del establecimiento educativo para asistirlos todos los días con el almuerzo que incluyen platos para celíacos, diabéticos, etc. “Estamos todos los días ahí viendo la calidad de lo que extendemos, para ver cómo lo pueden hacer de una mejor manera, cuál es el protocolo para que los chicos puedan comer todos y puedan repetirse, y hacerlo de una manera mucho más fluida”, aseveró.

“En cualquier día de la semana se puede ver el estado y las características de los alimentos. Justo en ese día, aparece un objeto extraño dentro de una vianda, que era milanesa con puré. Nos sorprende, con una impotencia terrible, ver que ellos muestran una larva, en un puré que primero estuvo hervido y luego mixeado con una mezcladora industrial. Nos resulta muy raro el hecho de que encima esté entero, a pesar de todos los procesos físicos como el calor y el hervor”, precisó.

Calificó al “error de comunicación” como “mala leche” y que “en la base del problema no solo le toca a mi emprendimiento, sino que me veo inmerso dentro de problemas institucionales”.

Agregó que no son los trabajadores de la empresa quienes dispensan los alimentos, sino que es la propia escuela quien designa a los encargados.

“Los preceptores, y el personal que trabaja dentro de la escuela nos dieron su completo apoyo y comprensión para esta situación, porque saben que el trabajo que estamos haciendo”, añadió y completó: “Se leen muchos comentarios de odio. Quizás ninguna de esas personas ha presenciado la felicidad con la que los chicos todos los días pueden comer en la escuela”.