Federico Trombotto: "Son tiempos para disminuir el nivel de conflictividad por eso el Gobierno prioriza las fuentes de trabajo, la competitividad y la seguridad jurídica”

El aumento de los juicios laborales en San Luis fue abordado por el ministro de Desarrollo Productivo, Federico Trombotto. Puntualizó cómo el Gobierno trabaja en el actual escenario tras encuentros con el sector privado en el inicio de la gestión. También profundizó en las tensiones entre empresas y trabajadores y habló del rol de la Justicia en el mercado.

En números fríos, la provincia registró un incremento del 40,7% en la litigiosidad en el sistema de trabajo. De acuerdo a la Superintendencia de Riesgos de Trabajo (SRT) de la Nación, el tercer trimestre del 2023 presentó un total de 1939 procesos judiciales, cifra muy superior a los 1378 que se registraron en el mismo periodo, pero del 2022.

Esto ubicó a San Luis como uno de los distritos con mayor cantidad de casos, superando a jurisdicciones con una mayor cantidad de habitantes tal como Entre Ríos (1187), Tucumán (451) o Corrientes (299)

Trombotto señaló que “la problemática preocupa mucho” y que, además, está dentro de los “principales temas” que fueron relevados y advertidos por parte del sector productivo, particularmente en zonas estratégicas como la capital y el espectro industrial de Villa Mercedes.

“Para nosotros como Gobierno es muy importante la presencia, la cercanía, que lo estamos haciendo desde el primer día. El eje vertebral de esta administración es la articulación entre lo público y lo privado. Es por donde fluye las diferentes herramientas y planes de desarrollo provincial”, sostuvo el funcionario.

Entre las acciones que trabajan está la focalización de “lo preventivo” con el objetivo de “dar respuesta” a todas aquellas situaciones que puedan significar un conflicto y también a aquellas que “promuevan el desarrollo, la recuperación y creación de los puestos de trabajo”.

“Entiendo que es muy importante el actuar de los representantes de los trabajadores, los gremios, con una mirada priorizando y promoviendo el diálogo, la escucha también, estando cerca de la realidad y con una perspectiva de búsqueda del bien común, del encuentro del acuerdo”, sostuvo en declaraciones a El Chorrillero.

En este sentido, advirtió el contexto de crisis y que en "estos momentos debemos priorizar los puestos de trabajos”: “Entiendo que para los sindicatos es muy importante que prioricen este punto de vista, en tiempos de tanta complejidad de una cantidad de variables que nos exceden en lo provincial, a las empresas y a los mismos trabajadores”.

Lo cierto es que en los últimos años el crecimiento de las causas judiciales vinculadas a lo laboral, crecieron exponencialmente. Un ejemplo es el salto que hubo desde 2016 con un total de 625, al 2022 que registró en todo el año unos 1814.

Si bien la administración pública y defensa y seguridad social siempre estuvo entre las principales actividades generadoras de juicios, el dato que resalta en esta oportunidad es que ahora se ubica como la primera con 687, superando incluso a la industria manufacturera (569).

El ministro también se refirió a algunas posibles razones que están detrás de estos números: “Esto sucede cuando el Estado está ausente. Esto se vio sobre todo en el 2023 en el Gobierno saliente que, junto a una parte de la Justicia, no tuvieron las prioridades que tiene la comunidad, la sociedad. Se rompen los valores esenciales y los recursos más prioritarios que tiene la sociedad, como lo es el desarrollo provincial”.

“Es un tema que ha ido en creces y que va poniendo en jaque, en riesgo a todos los valores estratégicos”, agregó y señaló que “son tiempos para tratar de disminuir el nivel de conflictividad y eso se hace con cercanía, con escucha y focalizando en cuáles son las prioridades que, en este caso, es el trabajo”.

Otro ítem en el que profundizó fue en la tarea de algunos jueces y fiscales que “ponen en riesgo y estrés el sistema por malas decisiones por estar focalizados en otras cuestiones y no en cosas que deben atender”.

“No son todos, sería injusto decirlo porque hay funcionarios y empleados judiciales que trabajan muy bien y procuran tener mucha prudencia y atención. Sí hay que trabajar en la mediación, en la prevención y en que haya fallos o resoluciones que sean ejemplificadoras y que también tiendan a la solución de los conflictos y no dejen que las cuestiones o los problemas se aviven o se agranden”, subrayó. A ello le sumó el impacto inmediato que tienen los juicios: lo económico para las empresas y la seguridad jurídica para la provincia.

“Hay un altísimo nivel de causas que impactan en lo financiero, y tiene como consecuencia que San Luis sea menos competitiva y menos atractiva para los inversores. Y este es un tema fundamental. Si no es más competitiva que los vecinos que tenemos a nuestro alrededor, no es atractiva. Ese es el gran desafío que está planteando el gobernador Claudio Poggi: el fortalecimiento del sector privado. Y lo vamos a lograr cuidando una cantidad de variables que por ahí no son tantas”, aseveró.

Fue en los foros productivos impulsado por el Gobierno donde las compañías, Pymes y emprendedores le manifestaron que la litigiosidad es uno de los principales inconvenientes a resolver. “Es prioritario para el sector”, afirmó Trombotto y utilizó el caso de Dánica como ejemplo.

“Por la falta de acción gubernamental, de respuesta de la Justicia y por la imprudencia de un grupo de delegados sindicales, se llegó al cierre de la empresa el año pasado. Si se hubiera actuado con prudencia cuidando el trabajo y con mayor celeridad, muy probablemente hubiera ayudado a que las cosas no lleguen a los niveles llegaron. Tras seis meses de un trabajo muy arduo y complejo se reactivó la compañía”, analizó y avisó que ponerla a funcionar nuevamente requerirá de una inversión de $5.000 millones

Pero, sin embargo, no dejó sin responsabilidad a la parte patronal en su conjunto. Resaltó que “deben tener un ánimo de cuidado de los puestos de trabajo, de valoración de los trabajadores y una promoción del diálogo constante”.

“En general veo esa vocación por parte del sector, pero en donde tienen que estar muy presentes los empresarios es en derramar, compartir, tener mucha conciencia de la dificultad del momento y de lo que necesita cada familia para poder llegar al fin de mes”, manifestó y señaló que “hay que tener mucha conciencia en la redistribución y tener esa vocación constante de desarrollar al trabajador en su dignidad y en su puesto”.

Por último, destacó el desafío que se viene con la meta de que “todos los actores tengamos la suficiente madurez y prudencia para poder sostener esas fuentes de empleo como corresponde”.

“Trabajadores, empresas, Justicia y Gobierno debemos cuidar los puestos que hay en el sector. Debemos estar a la altura de los tiempos en los que vivimos, con la complejidad macroeconómica en la que estamos insertos, que pueda haber situaciones de conflictividad, de riesgo, de contrapuntos en intereses y que todos ayudemos al cuidado de la fuente de trabajo”, finalizó.