El servicio de guardia del Hospital Ramón Carrillo disminuyó los tiempos de espera
Los pacientes con patologías graves tenían una demora de unos 15 minutos y hoy la atención es inmediata; en el resto de los casos, la espera se redujo de cuatro horas a unos 30 minutos promedio.
El jefe del Servicio de Urgencia y Emergencia (SUE) del Hospital Ramón Carillo, César Llanos dio a conocer el trabajo realizado en unas de las áreas más importantes: la guardia.
Hace un mes se hizo cargo del servicio y ya generó cambios, siguiendo las directivas del presidente del directorio, Adolfo Sánchez de León.
El SUE conforma varias áreas como shock room, urgencias y emergencias. Cuenta con un vasto internado de 28 camas, las cuales tienen un tercer nivel de complejidad para el paciente con diferentes tipos de patología en urgencias. En el último mes, el hospital evidencio una fuerte afluencia, ya que aproximadamente 3.800 pacientes que ingresaron a la guardia.
“De acuerdo con las estadísticas, el 80% son códigos verdes y azules, que hacen referencia a patologías que no son de gravedad. O sea que solo un 20% son las graves, códigos rojos y amarillos. El principal objetivo ha sido la atención universal, es decir todo tipo de pacientes, ya sea mutualizado o no, acelerar los tiempos de atención y brindar calidad”, informó Llanos.
Hubo una elevación de los estándares de los médicos que habitualmente están en el servicio de urgencias y emergencia, y además incorporaron médicos que son especializados en áreas críticas, lo que fue un gran desafío a corto plazo.
Foto ANSL.
En la actualidad mediante el mejoramiento de Triage y del área administrativa-médica se ha logrado:
-Códigos rojos y amarillos: actualmente la atención es inmediata en áreas de Shock Room y emergencias. Hasta mayo presentaba una demora promedio de 15 minutos.
-Códigos verdes y azules: actualmente los tiempos de espera máximo son de hasta 30 minutos. Presentando una marcada disminución con al mes pasado que presentaba una demora promedio a las 4 horas.
Cabe aclarar que los códigos rojos son todas aquellas patologías que ponen en riesgo inmediato la vida del paciente. Los códigos amarillos, en corto lapso ponen en riesgo la vida del paciente y se puede diferir su atención a un tiempo máximo de media hora. Los azules y verdes son el grupo de patologías que no ponen en riesgo la vida del paciente, pudiendo diferir su atención.
“Anteriormente existía un tiempo de espera que debía ser mejorado, hoy lo logramos y todo paciente es atendido de forma rápida y con calidad. Fue gracias a que coordinamos el servicio, los recursos, la infraestructura y el personal médico. Ha sido todo un desafío, pero se ha ordenado”, resaltó Llanos.
A instancias del Centro de Comando del hospital, se obtienen estadísticas de los diferentes tiempos de atención y de las diversas patologías, como así también de los códigos que se aplican en cada una de ellas mediante un Triage. Esas estadísticas ayudan a mejorar sustancialmente y se ve reflejado directamente en los números.
Otro eje fundamental fue la disminución de los costos de atención. Esto significa el monitoreo de aquellos estudios complementarios que solicitan las diferentes áreas del servicio de emergencia, ya sean estudios de imágenes o de laboratorio.
“Pretendemos seguir en ese rumbo aplicando ejes fundamentales como la atención universal, rápida y de calidad”, aseguró Llanos.
El área de SUE cuenta con profesionales que son especializados ya sea de cirugía, de traumatología y de clínica médica. El área de medicina critica tiene emergentólogos, médicos de Unidad de Terapia Intensiva y médicos de Unidad Coronaria.
“De esta manera cubrimos todas las áreas para no dejar nada al azar y que el paciente se atienda con la comodidad y con la convicción de que su patología va a ser resuelta”, cerró el médico.
Las mejoras en el Servicio de SUE son significativas, dejando por sentado que existen objetivos a futuro, a corto y a largo plazo. A corto plazo se pretende instaurar la red de Stroke en el hospital y en centros periféricos, cómo así también la Red de Infartos, más una Unidad de Dolor Toráxico. Está última ya está en marcha en el SUE para poder identificar estos dolores y conocer las patologías graves, principalmente a las que hace referencia a dolencias cardiovasculares.
Los objetivos a largo plazo son básicamente la realización constante de actualizaciones en cuanto a las especialidades en el SUE. (Con información de la ANSL)