Un investigador de Conicet San Luis fue distinguido con honores por la NASA
El profesional del IMASL recibió una mención honorífica de la institución aeroespacial por su trabajo en innovación en la gestión de recursos hídricos. Fue destacado entre casi 1600 participantes de 100 países diferentes.
Por Soffia Garrido Sosa
Iván Barbero, integrante del Instituto de Matemática Aplicada de San Luis (IMASL) e investigador de Conicet, fue reconocido con honores por la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) por su participación en el concurso “Pale Blue Dot: Visualization Challenge” con su proyecto de soluciones hídricas y mitigación de riesgos climáticos.
El especialista en ecohidrología y estudios de cuencas, le comentó a El Chorrillero las sensaciones impregnadas de autoexigencia que tuvo al recibir la mención especial: “Sentí emoción, alegría, no obtuvimos el primer puesto, recibimos un reconocimiento honorífico, pero queda la alegría de haber representado y del antecedente”.
Entre risas agregó: “La NASA nos mandó un bolsito como premio, que no cualquiera tiene, pero sin duda lo que más vale es haber llevado al Conicet en un lugar alto, la representación y el precedente en el curriculum”.
El concurso internacional del que participó, Pale Blue Dot, lleva el nombre de una fotografía de la Tierra tomada en 1990 por la estación Voyager 1 y el título del libro del científico Carl Sagan. Se encarga de reconocer las mejores creaciones de visualizaciones de datos públicos de observación de la Tierra y que promuevan los “Objetivos de Desarrollo Sostenible” (ODS) bajo la consigna “cero hambre, agua limpia y saneamiento, o acción climática propuesta por Naciones Unidas”.
Barbero se postuló a este certamen como integrante del grupo interdisciplinario de Estudios Ambientales de Conicet, con un trabajo en Innovación en la gestión de recursos hídricos y el diseño de proyectos de soluciones hídricas y mitigación de riesgos climáticos.
Dentro de los objetivos de la investigación, el equipo se planteó focalizarse en la problemática del agua de Uruguay, buscando brindar herramientas para desarrollar planes que a largo plazo permitan garantizar la disponibilidad y la gestión sostenible del recurso y el saneamiento en igualdad, además de aspirar a conservar y utilizar sosteniblemente el agua para el desarrollo sostenible.
Para llevarlo a cabo utilizaron imágenes satelitales Landsat. A partir de ese abordaje fotográfico, los autores destacaron los cambios en el uso del suelo en las cuencas hidrográficas, mostrando el impacto que tienen en las fuentes de agua que abastecen a las poblaciones.
Barbero, de 30 años, oriundo de Buenos Aires, es licenciado en Geología y eligió trasladarse a las sierras sanluiseñas para pulir su profesión y cursar un doctorado en la sede de Conicet San Luis. Mencionó que su próximo objetivo junto a su directora de investigación, María Poca, es centrarse en los estudios sobre las reservas acuíferas y recursos hídricos como los ríos que abastecen a San Luis.
Fuera del rol profesional y científico, se definió como un agradecido de la educación pública e invitó a aquellos que quieran estudiar geología, o cualquier especialidad que ofrezcan las aulas de las universidades, y a aquellos que no se animan a presentarse a concursos de estas magnitudes: “Yo soy medio tímido, pero con el apoyo de mis colegas nos mandamos, hay que animarse y probar, arriesgar y seguir estudiando”.