Francia: el oficialismo lanza coalición "Juntos por la República"; aumenta división de los conservadores

La victoria del partido de Marine Le Pen en las elecciones europeas pateó el tablero político en Francia, al punto de que el presidente Emmanuel Macron anunció la disolución de la Asamblea Nacional y convocó a elecciones anticipadas, con la primera ronda programada para el próximo 30 de junio y la segunda vuelta el 7 de julio.

Desde la sorpresiva decisión, el pasado domingo 9 de junio, las conversaciones políticas no han parado en París. El partido oficialista dio su primer paso para sumar fuerzas este jueves 13 de junio, al anunciar la creación de una coalición, bajo el lema "Juntos por la República".

El anuncio fue hecho en un "comité estratégico" de campaña que se reunió en la sede del partido presidencial Renacimiento, con la presencia del primer ministro, Gabriel Attal, otros ministros y los líderes de los partidos mayoritarios, Stéphane Séjourné (Renacimiento), Édouard Philippe (Horizontes), François Bayrou, (Movimiento Demócrata-MoDem ), Hervé Marsella (Unión de Demócratas independientes-UDI).

Este movimiento tuvo lugar justo un día después de que Macron se dirigiera al país en una rueda de prensa televisada, en la que urgió a las bancadas moderadas a unirse a su partido para frenar el extremismo.

“Las cosas son sencillas, hoy tenemos alianzas contra naturales en los dos extremos del espectro político”, subrayó el líder del Elíseo.

Esta alianza es la apuesta electoral del oficialismo, pero hay ciertas condiciones. Por ejemplo, el partido Horizontes, según una fuente de esa fuerza política, presentará sus candidatos a la prefectura en su propio nombre. Por tanto, no habrá un acuerdo para distribuir fondos entre los partidos a través de una asociación común, como en 2022.

Aunque tienen claro que, como centristas, son la tercera fuerza política, por detrás de las izquierdas, que fue la segunda más votada en las pasadas elecciones, al tiempo que la bancada de Le Pen lidera la intención de voto.

La izquierda apuesta por un nuevo "Frente Popular"

Aunque esta alianza fracasó anteriormente, el Partido Socialista, el Partido Comunista, Los Ecologistas y Francia Insumisa apuestan por un renovado "Frente Popular" que pueda vencer a Le Pen y le gane escaños al partido oficialista.

Sin embargo, y pese a que las discusiones han apuntado a una alianza de cara a los comicios anticipados, aún hay dificultades entre sus dirigentes.

“Queremos presentar un programa de rupturas sociales y ecológicas para construir una alternativa a Macron y combatir el proyecto racista de la extrema derecha”, señaló un comunicado publicado por la coalición.

Las discusiones se han vuelto más tensas, según admitió el líder comunista Fabien Roussel. "Casi hemos logrado acordar el contrato gubernamental que nos unirá", afirmó el político, al aclarar que el punto espinoso entre las partes está centrado en el reparto de las circunscripciones.

“No es porque le demos 100 distritos electorales más al Partido Socialista que ellos son los indicados para ganar, lo que importa son los distritos electorales difíciles”, aseguró una fuente de los ecologistas, este jueves, durante el cuarto día de negociaciones.

De acuerdo con lo resuelto el miércoles, así quedaría el número de circunscripciones que se asignarán a cada partido en el marco de candidaturas únicas: 229 para Francia Insumisa, 175 para los socialistas, 92 para los ecologistas y 50 para los comunistas.

Por su parte, el líder de Francia Insumisa, Jean-Luc Mélenchon, se mostró optimista. En cuatro días, “la izquierda ha logrado una hazaña (…) El trabajo es delicado. Los equipos de negociación están haciendo un buen trabajo", sostuvo en sus redes sociales.

Convocan a protestas en todo el país contra la ultraderecha

En medio de las discusiones, las bancadas de izquierda hicieron un llamado para combatir el crecimiento de la ultraderecha en Francia con una serie de medidas.

A petición de cinco confederaciones sindicales, toda la izquierda y sus asociaciones marcharán juntas este sábado 15 y domingo 16 de junio por toda Francia, con la esperanza de crear una movilización de votantes para impedir la llegada de una mayoría de extrema derecha a la Asamblea Nacional.

En un comunicado conjunto, publicado el lunes 10 de junio, urgieron a los ciudadanos a "sumarse a las marchas".

"La manifestación del sábado contra la extrema derecha es un muy buen punto de apoyo para el nuevo frente popular”, dijo la diputada de Francia Insumisa, Clémence Guette, que participó en las negociaciones con otros grupos de izquierda.

Divisiones en la derecha tradicional tras intento de alianza con Le Pen

En el otro extremo del espectro político, el partido de la derecha tradicional, Los Republicanos atraviesan por una crisis interna que se agudiza.

Este jueves, un día después de que su líder Éric Ciotti fuera expulsado tras anunciar su intención de pactar una alianza con la bancada ultraderechista Agrupación Nacional, el político llegó a la sede del partido político, insistió en que sigue siendo el dirigente de la bancada y puso en duda la legitimidad de la acción que lo relevó del cargo.

Fue expulsado de su propio partido, tras un consejo extraordinario, que tuvo lugar fuera de la sede del partido, debido a que Ciotti, se atrincheró allí.

Una medida que resquebrajó más la unidad dentro de este sector político. Ciotti aún reclama la presidencia y se niega dejar sus funciones. Incluso, informó sobre una reunión este jueves con Jordan Bardella, presidente de Agrupación Nacional.

El partido ratificó que la decisión fue válida y legítima, por lo que ya no encabeza esa fuerza política.

Los Republicanos han perdido terreno políticamente y varios de sus dirigentes, por las rupturas e inconformidades dentro de la organización política se han alineado con otros partidos. Varios se unieron al Gobierno de Emmanuel Macron, como Gérald Darmanin, que dejó las filas de Los Republicanos y ahora es el ministro del Interior del Gobierno francés.

La molestia de varias de sus dirigentes, aseguran, es que Ciotti llevó a cabo estas conversaciones de manera secreta y sin consultar al resto de los dirigentes. A ello se suma que la derecha republicana nunca ha pactado con la ultraderecha.

Sin embargo, con la fuerza electoral de Le Pen, tras las elecciones europeas, una alianza con ellos podría significar para Los Republicanos más escaños y presencia en la próxima Asamblea, frente a un eventual escenario en el que pierdan espacio ante los socialistas.

Mientras se ajustan las alianzas o se finiquitan las rupturas, Gabriel Attal declaró este jueves que está a favor de un debate televisado con el jefe la Agrupación Nacional, Jordan Bardella, y el líder de la Francia Insumia, Jean-Luc Mélenchon, durante la campaña electoral legislativa.

Este debate "debe ser entre quienes han sido más o menos identificados como potencialmente primer ministro al final de estas elecciones, Jordan Bardella por la extrema derecha y sus aliados, Jean-Luc Mélenchon por la extrema izquierda y sus aliados, y luego yo mismo para este bloque progresista", destacó Attal.

No obstante, la definición de quiénes podrían ser los posibles candidatos a primer ministro, tanto de la izquierda o derecha, aún no está definido.

En el caso de las izquierdas, Mélenchon aseguró estar preparado para ese desafío, pero la presidenta de los socialistas en la región de Occitania, Carole Delga, aclaró este 13 de junio que “no será primer ministro” y que el debate es aún prematuro. (France 24)