Dos sobrevivientes del hundimiento del crucero ARA Belgrano se reencontraron en Villa Mercedes después de 42 años
Los ex combatientes reconstruyeron una parte de la historia de sus vidas.
Por Sonia Schoenaker
Este viernes, un momento emocionante se vivió en Villa Mercedes cuando Leontes Muñoz se reencontró después de 42 años con Norberto Mario Macedo, ambos sobrevivientes del hundimiento del crucero ARA General Belgrano en medio del conflicto por las Islas Malvinas, en 1982.
Aquel 2 de mayo, el soldado oriundo de Ituzaingó, Macedo, se arrojó al agua desde una balsa que estaba pinchada y el soldado villamercedino logró ponerlo a salvo subiéndolo a otra embarcación, a pesar de que superaba ampliamente la capacidad de personas a bordo.
Desde entonces hasta hoy han pasado 42 años que quedaron plasmados en un fuerte abrazo en el que se fundieron dos de los sobrevivientes. Muñoz fue sorprendido por su compañero de Buenos Aires en un reencuentro que organizó el Veterano de Guerra de Malvinas, Héctor Daniel Ponce.
Fue citado en las instalaciones del Hotel Líbano con la excusa de realizar una conferencia de prensa sobre la presentación de la segunda fecha del Campeonato Provincial de Pista de Tierra en el que participa como piloto y allí recibió la visita.
"Cuando salté de la balsa pinchada dejé a tres compañeros que después murieron, se ve que he flotado, he pasado al lado y Muñoz me subió", relató Macedo, que aún no logra reconstruir la escena del rescate en su memoria.
Con una temperatura de -20º y en medio de un temporal que generaba olas de nueve metros, los sobrevivientes pasaron más de 30 horas con el agua hasta la cintura dentro de la balsa: "Dios nos dio la oportunidad de estar vivos y tenemos la suerte de contar nuestras historias".
Aseguró que "no podría encontrar quién era el que me había salvado" y que lo buscó "por todas partes del país", hasta que Ponce vio un video en el que contaba su historia y pudo concretar la reunión.
"Dios te da la vida y a veces pone las manos de alguien para que te salve, y él fue mi salvador", dijo y añadió: "Pude formar una familia, pude sobrevivir, hoy estar vivo y agradecerle personalmente".
Posteriormente le entregó una réplica a escala del crucero, que fue hundido por el submarino nuclear HMS Conqueror y dejó 323 muertos en aguas australes.
Por su parte, Muñoz señaló que "muy pocas veces" ha participado en los temas relacionados a la Guerra de Malvinas.
"Le agradezco a la vida por seguir estando vivo después de haber pasado lo que pasamos en ese momento. Hoy tenemos la dicha de estar juntos, de poder reencontrarnos y trataremos de dar vuelta la página, sentirnos felices y dejar la nostalgia para otro día", manifestó.
Y recordó: "Tuve la suerte de que mi balsa en todo ese temporal se acercó a otra. Yo no soy un gran nadador, y con las temperaturas de -20ºC tuve la posibilidad de trasladarme hasta la que llevaba a 30 personas, siendo que tienen una capacidad de 20. Yo me metí de prepo, él quedó en el agua. Le tendí la mano y lo subí con la resistencia de los que tenía a mi espalda. Jugábamos con la vida en ese momento. No solamente con la nuestra, sino de los 30 que estaban en la balsa".
Para finalizar, el soldado de Ituzaingó sostuvo que el encuentro "es algo muy especial, como volver 42 años atrás".
"A mi él me cerró una parte de la historia que me quedó en blanco en mi cabeza. Me explicó cómo fue la situación, cómo fue el rescate. Vuelvo a recuperar la memoria viendo el Belgrano hundirse cerca de nosotros a 150 metros", concluyó.