Fracasó el golpe de Estado en Bolivia: detuvieron a general que lideró movilización militar
La Fiscalía General adelantó que iniciará una investigación penal en su contra y contra quienes lo acompañaron en la movilización militar en los alrededores del palacio presidencial.
Las fuerzas armadas bolivianas, con vehículos blindados, se retiraron del palacio presidencial en La Paz el miércoles por la noche y un general fue arrestado después de que el presidente Luis Arce denunciara un intento de "golpe de Estado" contra su Gobierno.
Horas antes, militares encabezados por el general Juan José Zúñiga, recientemente despojado de su mando militar, se habían movilizado hacia la céntrica Plaza Murillo, sede del palacio presidencial y del Congreso.
En un mensaje al país, el presidente Luis Arce denunció que hubo un intento de golpe de Estado e instó a los ciudadanos a salir a defender la democracia.
"El país hoy está enfrentando un intento de golpe de Estado, hoy el país enfrenta una vez más intereses para que la democracia en Bolivia se trunque", sostuvo.
"Necesitamos que el pueblo boliviano se organice y se movilice en contra del golpe de Estado en favor de la democracia", agregó.
El Gobierno repudió el intento de golpe en Bolivia: "La democracia no se negocia"
Dentro del palacio presidencial, Arce tomó juramento a José Wilson Sánchez como comandante militar, en reemplazo de Zúñiga, quien pidió que se restablezca la calma y el orden.
Las tensiones han ido en aumento en Bolivia previo a las elecciones generales de 2025 dado que el expresidente izquierdista Evo Morales planea competir contra su ex aliado, el actual mandatario Arce, creando una gran brecha en el partido socialista gobernante y una mayor incertidumbre política.
Muchos no quieren el regreso de Morales, quien gobernó desde 2006 hasta 2019, cuando fue derrocado en medio de protestas generalizadas y reemplazado por un gobierno conservador interino a cargo de Jeanine Áñez. Arce asumió el poder en 2020.
Zúñiga dijo recientemente que Morales no debería poder regresar como presidente y amenazó con bloquearlo si intentaba hacerlo, lo que llevó a Arce a destituirlo de su cargo.
En declaraciones a la prensa, Zúñiga dijo que el Ejército, la fuerza aérea y la armada boliviana se encontraban acuarteladas en todo el país.
"Están los tres comandantes de las fuerzas, hemos venido a manifestar nuestra molestia", dijo Zúñiga. "El pueblo pide basta, basta de saqueo en nuestro país, (…) basta de destrozar a nuestro país".
La Fiscalía General de Bolivia dijo que iniciará una investigación penal en contra de Zúñiga y quienes lo acompañaron en los sucesos del miércoles.
La Fiscalía General del Estado reafirma su compromiso de defensa de la legalidad y los intereses generales de la sociedad en el marco de la preservación de nuestra democracia", dijo en un comunicado.
(NA)
22:26 Denuncian un intento de golpe de Estado en Bolivia: detuvieron al jefe del Ejército que encabezó un levantamiento
La Fiscalía General adelantó que iniciará una investigación penal en su contra y contra quienes lo acompañaron en la movilización militar en los alrededores del palacio presidencial.
Quedó detenido el ex general del ejército boliviano, Juan José Zúñiga, tras liderar a un grupo de militares que llevaron adelante un intento de golpe de Estado contra el presidente Luis Arce.
Al comunicarse la medida, la Fiscalía General de Bolivia aseguró que iniciará una investigación penal en contra de Zúñiga y contra quienes lo acompañaron en la movilización militar en los alrededores del palacio presidencial.
"Las Fuerzas Armadas pretenden reestructurar la democracia, que sea una verdadera democracia. No de unos cuantos, no de unos dueños que ya tienen 30, 40 años manejando el país", había justificado el destituido comandante del ejército en las afueras del Palacio Quemado, rodeado de soldados y unos ocho tanquetas militares.
El máximo tribunal de Justicia de Bolivia condenó el levantamiento y lo calificó calificó como un atentado contra la estabilidad democrática del país.
Quién es Juan José Zúñiga, el militar que lidera el levantamiento en Bolivia
“Nuestra Patria, una vez más, esta bajó el acecho de los enemigos internos y externos que buscan la división, la desestabilización y el odio entre bolivianos, para apoderarse de los recursos naturales en beneficio de intereses mezquinos y de grupos de poder que responden al caudillismo”.
Esa frase, dicha hace pocas horas, muestra el perfil y las intenciones del general Juan José Zúñiga, el destituido comandante que lidera a los sublevados en La Paz, en una acción que el gobierno de Luis Arce calificó sin vacilaciones como un intento de golpe de Estado.
Zúñiga había sido relevado el martes de su cargo en la víspera por amenazar al ex mandatario Evo Morales. Se opone tajantemente a una candidatura del exmandatario para las elecciones de 2025. “No puede ser más presidente en este país”, bramó ante las cámaras de TV el lunes.
“El señor Morales ya ha sido presidente tres, cuatro gestiones, re, re, reelegido. Legalmente, está inhabilitado”, insistió. Y acotó: “llegado el caso” no permitiría “que pisotee la Constitución y que desobedezca el mandato del pueblo”, lo cual fue tomado como una amenaza.
Esta tarde Zúñiga y un numeroso grupo de militares armados, algunos encapuchados, ingresaron al Palacio Presidencial, El Quemado, en La Paz, frente a la plaza Murillo, que es la sede del gobierno nacional.
“Soy un militar de honor que está dispuesto a ofrendar su vida por la defensa y la unidad de la patria. Nuestra patria, una vez más esta bajó el acecho de los enemigos internos y externos que buscan la división, la desestabilización y el odio entre bolivianos, para apoderarse de los recursos naturales en beneficio de intereses mezquinos y de grupos de poder que responden al caudillismo”, explicó a la prensa Zuñiga.
Zúñiga ocupó el puesto de Jefe del Estado Mayor del Ejército, y a lo largo del tiempo, ha mantenido diversos enfrentamientos con Evo Morales, que lo acusó de ser uno de los principales actores del llamado “Plan Negro”, una presunta operación orquestada para perseguir a líderes cocaleros y adversarios políticos.
Según consiga el sitio local Los Tiempos, el militar fue acusado también de estar involucrado en el desvío presuntamente de manera irregular de 2,7 millones de pesos bolivianos que estaban destinados al pago de los bonos “Juancito Pinto” y “Renta Dignidad”.
Medios bolivianos también indican que Zúñiga es conocido por haber sido visto en algunos actos sociales de la alta sociedad y se ha destacado en su trayectoria por sus conocimientos en inteligencia militar y por conocer los movimientos de diversos dirigentes políticos.
Cuando le tomó juramento para el cargo, 1° de noviembre de 2002, Arce le demandó apego a la Constitución. “El lugar de las Fuerzas Armadas está en el seno de su pueblo y su obligación es defender al gobierno legítimamente elegido en las urnas y apegarse a la Constitución”, dijo Arce en el acto de posesión de las nuevas autoridades militares.
Evo Morales había acusado previamente a Zúñiga de liderar el grupo militar Pachajcho, que supuestamente ejecuta un “plan negro” en su contra. El pasado domingo, el expresidente señaló que tiene videos y audios que muestran que el Comandante del Ejército se proponía su eliminación y la de sus más estrechos colaboradores. “Este señor es un verdadero mitómano, utiliza la mentira como estrategia para retornar al poder”, replicó Zúñiga en el set de televisión. A continuación, afirmó que los militares no permitirán que Morales vuelva al poder. Un día después, se lo había relevado de su comandancia, según trascendió, y hoy se levantó en armas.