X

Los delincuentes que mataron al policía también obligaron a una víctima a comerse un billete

En la audiencia de formulación de cargos contra uno de los acusados, Julio Daniel Lescano, la fiscalía dio cruentos detalles del asalto ocurrido en Cortaderas donde perdió la vida Renato Mauricio Fuentes. Se levantaron 21 vainas servidas en el patio de la vivienda producto del enfrentamiento.

Mauro Maximiliano Vieyra Villegas (izq.) falleció horas después del asalto; Julio Daniel Lescano fue enviado a la penitenciaria.
Actualizada: 24/09/2024 22:29
PUBLICIDAD

En la audiencia de formulación de cargos en la que la Justicia determinó la prisión preventiva por 120 días de Julio Daniel “Ringo” Lescano, uno de los acusados del asesinato del policia Renato Mauricio Fuentes, surgieron cruentos detalles del asalto ocurrido el viernes pasado en Cortaderas.

Un brutal enfrentamiento entre delincuentes y los policías que dejó 21 vainas servidas en el patio de la vivienda y un sádico acto en el que hicieron comer un billete de mil pesos a uno de los asaltados, son algunos de los hechos que relató la fiscal adjunta Lucila Daniela Giamperi en la audiencia de formulación de cargos.

Los hechos ocurrieron el pasado viernes a las 20:40 en una vivienda de dos pisos ubicada en calle Atamisqui N°3, loteo el prado, a 800 metros del kilómetro 17 de la Ruta Provincia N°1 de Cortaderas.

Lescano y su cómplice Mauro Maximiliano Vieyra Villegas, ingresaron a la vivienda encapuchados y con armas “de puño”, es decir cortas y cuellos polares que cubrían sus rostros. El primero llevaba una gorra azul, que sería clave para sumar como prueba en su contra ya que en la cámara de seguridad se lo ve llevándola y cuando fue detenido, la tenía entre sus pertenencias.

Subieron a la planta alta, donde notaron que Gáspar Ceballos Korvs, uno de los ocupantes de la casa, se dio cuenta de su presencia y cerró la puerta de su habitación rápidamente, echando llave.

Lescano y Villegas sorprendieron entonces a la madre de Gaspar, Patricia Marta Korvs, que estaba en otra habitación y la obligaron a tirarse al suelo. “Abrí, salí, porque mató a la vieja”, le gritaron al hijo. El joven desesperado, no encontró las llaves y allí fue que los delincuentes decidieron echar la puerta abajo a patadas para reducirlo.

Cuando ingresaron a la habitación, el muchacho estaba boca abajo en el suelo con una pistola en sus manos, que había tomado para defenderse.

La audiencia de formulación de cargos donde ordenaron la prisión preventiva de Lescano.

A Gaspar lo encañonaron en la cabeza, le colocaron las manos en la espalda y le pusieron tres precintos plásticos negros en las muñecas. Le cubrieron la cabeza con un trapo y comenzaron a propinarle una golpiza con puños y patadas.

“¿Dónde está la llave de la caja fuerte?”, le preguntaron, a lo que el joven les indicó que estaban en el bolsillo del saco colgado en un placard. Luego de encontrarla, los ladrones obligaron al joven a comerse un billete de mil pesos.

“¿Dónde está tu papá? ¡Esto es por el ´garca´ de tu viejo!”, exigieron saber los delincuentes. De alguna manera, el padre de familia estaba presente. De viaje en Tucumán, escuchó toda la secuencia a través de una cámara de seguridad instalada en la planta baja de la casa, que remotamente enviaba las imágenes a su celular.

El padre gritó a través del aparato. Los malvivientes le pidieron a la familia la ubicación del dispositivo. Revolvieron cada cajón y armario del hogar. Terminaron recuperando armas largas, municiones, dos celulares, un Samsung y otro Iphone 11, $2 millones y 3.000 dólares.

Realizada la cruel faena, tomaron la cámara de seguridad y procedieron a irse. Aquí la fiscal no detalló de cuál de los dos malvivientes se trataba, pero uno alcanzó a cruzar el umbral de la puerta trasera de la casa. Pero el otro fue sorprendido por el oficial principal Fuentes dentro de la vivienda.

“Al piso” le gritó; el delincuente hizo caso omiso, le disparó al policía, emprendió la huida y allí inició el intercambio de disparos, en el patio de la casa.

Detrás de Fuentes, venía el subcomisario Abel Caro, que le disparó a uno de los malvivientes que estaba en el piso y que desde ahí seguía disparando. Quien estaba parado, tiraba al costado de un gallinero de la casa.

Fuentes cayó herido de muerte, Caro quedó sin balas y se retiró a la calle principal a buscar asistencia.

“Se mencionan heridas presentadas compatibles con arma de fuego, que ocasionaron daño corporal con compromiso vascular y órganos internos vitales: ambos pulmones, aparato digestivo y vasos sanguíneos. La causa inmediata de la muerte es la hemorragia profusa causada, dando como resultado un shock hipovolémico, lesión pulmonar aguda, provocando una insuficiencia pulmonar, asfixia y paro cardiaco, lo que ocasiona un fallo multiorgánico”, resumió la fiscal sobre la autopsia de Fuentes.

Vieyra y Lescano huyeron. Pero el primero había resultado herido, no encontró refugio en las viviendas de la zona y fue capturado por las fuerzas de seguridad. Tenía un orificio de bala de entrada en la zona lumbar derecha, pero no de salida. Murió horas después en el Hospital Madre Catalina Rodríguez de Villa de Merlo.

Este domingo a Lescano le fue esquiva la suerte y fue detenido en el puesto de control de La Punilla. La Policía requisó la vivienda donde residía, obtuvo evidencias y ahora está en el Complejo Penitenciario "Pampa de las Salinas" donde aguardará los resultados de la causa, en la que provisoriamente está acusado de robo calificado por el uso de arma de fuego y homicidio criminis causa.

Lescano, también conocido como "Ringo", tiene al menos cuatro causas por robos con uso de armas y por el cual tendría que estar purgando una condena hasta septiembre de 2026. En su prontuario figuran dos condenas por robo agravado por escalamiento de tres años y dos meses de prisión y otra por uso de armas y escalamiento por cinco años y dos meses.

El criminal, de 32 años, vivía hace unos siete meses en Cortaderas, en una casa ubicada en la zona de arroyo Benitez, que comparte con su pareja y un hijo, un cuñado y otros familiares.

Durante la audiencia de formulación de cargos, el acusado se limitó a responsabilizar varias veces del asalto a un hermano de Vieyra y aseguró que con él "estaban perdiendo el tiempo". A su vez, aseguró que a la hora del asalto estaba en otro lugar, aunque la fiscalía sostiene que hay evidencia que lo ubica como uno de los dos ladrones que protagonizaron el hecho.

El oficial principal Renato Mauricio Fuentes. Tras su muerte en cumplimiento del deber, fue ascendido a comisario.

PUBLICIDAD

EN PORTADA EL CHORRILLERO

SUBIR