Historias de San Luis: peluqueros y peluqueras (primer corte)
Son cientos las mujeres y hombres que honran este oficio en la provincia de San Luis.
Por eso lo del primer corte, porque seguramente tendremos más de un capítulo.
Será un relato desordenado en el tiempo, a medida que van apareciendo los recuerdos.
Algunos están, otros no.
Entre los hombres, los hermanos Córica en la calle San Martín. Pepe y Diego.
Luego se mudaron a la Hipólito Irigoyen.
Desde niño fui su cliente por decisión de mi padre. Pobres. Siempre doble trabajo, pero aclaro que no me cortaban entre los dos.
Cortes prolijos, con raya al costado izquierdo. El pelo arriba de la oreja y que apenas rozara el cuello.
Era el corte tradicional de la época para la mayoría.
Otros nombres tradicionales de 60 años atrás.
Alberto Miranda y Enrique Bruno. Que prosa florida la del amigo Miranda.
Aparece la peluquería Roma en la calle Junín entre Ituzaingó y Sucre.
Carmelo Maceo. Cangianito.
En esa época, cuando entrabas a trabajar con algún peluquero famoso, primero eras aprendiz y luego pasabas a la categoría de tijera.
Pedro Schevetz. Inolvidable presencia.
Y tenemos muchos más que llegan a la memoria.
Como peinarse con gomina Glostora, o fijador Lord Cheseline de atractivo color azul. Y si no había, el limón en el pelo era una buena solución.
Faltan muchos pero muchos nombres. No se enoje. Y espero su ayuda.
La seguimos con un nuevo corte el próximo domingo.